El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, volvió a abordar hoy la dura renegociación de la deuda bonaerense, y además de acusar a los bonistas de buscar “extorsionar” a la Provincia, también se quejó por la “herencia” recibida por la gestión de María Eugenia Vidal.
El mandatario bonaerense calificó como un “yunque” la “deuda impagable” del Gobierno anterior, y sostuvo que “fue una pésima decisión dejar deuda en dólares con acreedores extranjeros”. ¿Qué dicen los números oficiales?
Según los datos del Ministerio de Economía bonaerense, la gestión de María Eugenia Vidal incrementó la deuda en dólares en un 16,6%, pasando de 9.362 millones de dólares al asumir a 10.913 millones tras dejar el cargo.
Sin embargo, si se mide en relación con el Producto Bruto Geográfico (la forma más fidedigna de comparar este tipo de variables), se advierte allí un fuerte salto del 5,9% en 2015 al 8,9% en 2019. También hubo un fuerte incremento del endeudamiento en relación a los recursos totales de la Provincia, pasando del 51% al 74,2%: mientras que la deuda aumentó un 435%, los ingresos bonaerenses lo hicieron en el orden del 268%.
De todos modos, y como es sabido, el pago de la deuda exige la obtención de dólares, y la Provincia debe comprar divisas con pesos. En ese aspecto, el endeudamiento durante la gestión de Vidal se incrementó un 435% en pesos, pasando de $ 122 mil millones en 2015 hasta $ 653 mil millones en 2019. En ese sentido, la devaluación operada durante el Gobierno de Mauricio Macri -el oficial pasó de $ 9 a $ 63- le jugó una mala pasada a la administración provincial.
Otra marca de la gestión Vidal fue el cambio en el perfil de la deuda pública provincial: en 2015, Scioli dejó la gestión con un 57,9% del total de la deuda en dólares, variable que saltó al 83,7% en los siguientes 4 años. Esta situación fue ayudada por las restricciones para salir al mercado externo que sufrió Scioli durante el último tramo de su gestión -en plena la crisis con los fondos buitre- y la apertura a los acreedores internacionales que tuvo el país con Macri.
También durante la gestión de Vidal hubo una aceleración en los tiempos de vencimiento de la deuda pública bonaerense: según datos de la administración Kicillof, el 67% de los vencimientos previstos para 2020 (US$ 2.274 millones) fueron tomados por la exmandataria, mientras que el restante 33% (US$ 1.143 millones) son previos a 2016. En tanto, para 2022 el 90% de los vencimientos de deuda corresponden a empréstitos otorgados a la gestión anterior.
Finalmente, el Gobierno de Kicillof también aseguró que, comparados los vencimientos de cada gestión, deberá afrontar un 65% más de obligaciones que su antecesora: 10.248 millones de dólares contra 6.200 millones de dólares. (DIB)