Su hija hizo un pedido desesperado. «Pido que si alguien conoce al embajador me ayude, estoy sola acá y me es muy difícil todo. Estoy
desesperada».
Una familia de La Plata vive un drama en Cancún. Una mujer de 63 que viajó a México junto a su hija y nieta empezó a sentirse mal a las pocas horas de haber arribado producto de haber sufrido un infarto. Y a partir de allí comenzó la pesadilla por lo que piden una urgente ayuda diplomática, según informa diario El Día.
La hija de Mónica Miriam Mantarás, de nombre Huilén, contó quebrada en llanto en un video que le envió al diario platense: “Vine de vacaciones con mi mamá y mi hija de un año. Ella se empezó a sentir muy mal, tenía mucho dolor en la espalda y en el pecho, y después se descompensó. Por eso nos dimos cuenta que estaba cursando infarto”. Y agregó: “La llevé de urgencia a una clínica que está a cinco minutos del hotel pero me dijeron que no la atendían sin antes pagar 6.000 dólares, pero no tenía más fondos en la tarjeta”.
El drama no quedó ahí, se fue agravando. “Me decían que de Assist Card (la compañía de seguro al viajero que había contratado) tardaban en acreditar el pago. Además, en esa clínica no tenían los recursos suficientes para atenderla, por lo que me mandaron a otra clínica que tenía convenio directo”, contó la mujer, que siguió relatando la odisea: “Antes de trasladarla me querían hacer pagar por adelantado 3.400 dólares, pero les dije que no tenía más plata y que necesitaba que la trasladen. Finalmente logré que la trasladaran y cuando llegué a la clínica Playamed firmé la autorización de la ambulancia que decía costo cero”.
Siempre de acuerdo con el relato que la mujer hizo a El Día, “cuando la estaban atendiendo vino la secretaria con un posnet para pedirme otros 2.500 dólares para una medicación y no tenía cómo pagarle. Le pregunté si era algo de vida o muerte, y le fue a preguntar a la médica. Lo cierto es que por arte de magia le dieron la medicación sin tener que pagar nada”, aseguró. Luego, en medio de la desesperación, le dijeron que la empresa aseguradora no cubría el tratamiento: “Me dijeron que tenía que pagar 55.000 dólares, y que mis familiares me tenían que pasar ese dinero, pero era imposible porque no lo tenemos. Después me dijeron que eran 25.000 dólares. Se contradecían todo el tiempo”.
En ese sentido, completó la hija de la mujer: “Siempre faltaban papales y una firma. Ahora espero que Assist Card envíe los papeles y hagan el pago, y que la clínica autorice a hacer el procedimiento”. Es por eso que visiblemente conmocionada por la situación que atraviesa hizo un llamado a la solidaridad: “Pido que si alguien conoce al embajador me ayude, estoy sola acá y me es muy difícil todo. Estoy desesperada”. (DIB) GML
