Según comunicó la entidad, estas tasas, que en los primeros ocho meses del año sumaron $ 3.500 millones, “impiden el crecimiento del crédito”. Los clientes serán transferidos a otras sucursales. Rechazo de La Bancaria.
El Banco Nación (BNA) informó que decidió cerrar su sucursal ubicada en Ramos Mejía, en el partido de La Matanza, debido a la elevada incidencia de las tasas municipales, que según comunicó la entidad “suman lo mismo que la nómina salarial de los empleados en el distrito”. Esta situación, argumentó el banco, afecta considerablemente el margen financiero y eleva el costo de ofrecer servicios de crédito, lo que complica las operaciones. Así, el BNA continuará la atención de sus clientes de esa zona a través de filiales fuera del distrito y de sus canales digitales. La Asociación Bancaria ya anunció su “rechazo y repudio” al cierre de la entidad e informó que se reunirán con autoridades del BNA el próximo martes.
Según el texto difundido por la entidad bancaria, “el municipio de La Matanza somete al Banco Nación a una altísima presión tributaria, dado que es la jurisdicción del país donde las tasas municipales tienen mayor impacto sobre el margen financiero de la entidad: en los primeros ocho meses de 2024 acumuló pagos por $ 3.500 millones en concepto de tasas municipales, suma que equivale a la nómina salarial de los 150 colaboradores que revistan en sus sedes del distrito”.
“El Gobierno Nacional ha logrado el superávit financiero, consigue desplomar la inflación y los argentinos recuperamos la moneda. Nuestro mandato en el Banco Nación es multiplicar los créditos y lo estamos haciendo. A finales de septiembre los desembolsos de préstamos de 2024 alcanzaron el equivalente a US$ 11.000 millones con un crecimiento récord en términos nominales y reales. Vamos a suprimir los obstáculos que impiden el crecimiento del crédito: las tasas municipales exorbitantes son uno de ellos“, sostuvo por su parte el presidente del BNA, Daniel Tillard.
La migración de la cartera de Ramos Mejía se producirá antes del 31 de diciembre de 2024, se aseguró desde la entidad. Y los clientes y las operaciones que tiene el Banco Nación serán reubicados en sucursales fuera del partido.
Hace algunas semanas, el Banco Nación había anunciado el cierre de nueve sucursales en La Pampa ante la intención de la provincia de aumentar el impuesto a los Ingresos Brutos sobre los créditos para familias y pymes. El gobernador Sergio Ziliotto luego dio marcha atrás con la medida y la entidad finalmente no avanzó con los cierres.
Lucha y conflicto en puerta
En un comunicado, la Asociación Bancaria (el gremio conocido como La Bancaria) aseguró que ante el anuncio del cierre “hemos solicitado una reunión urgente al presidente del BNA, la cual se llevará a cabo el día martes por la tarde”.
“Rechazamos y repudiamos el cierre de sucursales, es innecesario, injusto y perverso poner a los trabajadores/as en la angustia permanente de no saber si al otro día van a tener su lugar de trabajo o no”, continúa el texto.
Y sigue: “Hay que decirlo con toda claridad: estas actitudes tienen un trasfondo político. Basta analizar que un Gobierno Provincial como el de La Pampa (que tiene una clara posición política contra el gobierno y se ha expresado contra la privatización del Banco Nación) quiera subir transitoriamente un impuesto, para que el Gobierno tome venganza anunciando cierres de sucursales en esa provincia”.
“Idéntica situación sucede ahora con La Matanza, agravada por el hecho que un día después de la clausura de la obra del empresario fetiche del Gobierno Nacional, la reacción del mismo es cerrar una Sucursal del Banco Nación en ese municipio como represalia”, en referencia al conflicto con Marcos Galperín por la frustrada construcción de un centro de Mercado Libre.
“Triste papel del Gobierno, el usar al Banco como instrumento político de persecución y sometimiento de quienes piensan distinto. Más triste aún es el papel del directorio del BNA, que es utilizado como fuerza de choque y además como instrumento de disciplinamiento político, y terminan siendo los ‘empleaditos del mes’ del empresario fetiche de este gobierno”, lamenta La Bancaria.
“Si el Banco no garantiza los puestos de trabajo, condiciones de los mismos, y si pretende avanzar con su política de ajuste y reducción de sucursales, la respuesta será una sola y contundente: HABRÁ LUCHA Y HABRÁ CONFLICTO!!!”, cierra con contundencia el comunicado del gremio bancario. (DIB) MM