El Batman Solidario de La Plata se puso el traje por última vez y se despidió con una emotiva carta

Vinculado al Hospital de Niños “Sor María Ludovica”, comenzó sus misiones el mismo día de la fatídica inundación ocurrida el 2 de abril de 2013.

Un personaje muy querido de la ciudad de La Plata, tras una década de misiones dedicadas a ayudar a los más chicos, decidió terminar su obra: el Batman Solidario de la capital bonaerense se puso el traje por última vez y escribió una sentida carta en su cuenta de Facebook para despedirse.

Vinculado al Hospital de Niños “Sor María Ludovica”, donde concentró su labor de ayuda, comenzó sus misiones el mismo día de la fatídica inundación ocurrida el 2 de abril de 2013, horas antes de que reinara el caos y el horror en la ciudad.

Maestro de una escuela pública y vecino del barrio Meridiano V – casi lo único que se sabe de su vida “real” – comenzó llevando útiles escolares a los niños internados y terminó realizando importantes colectas con ayuda de la comunidad. Acercó pintura para el edificio, ropa, televisores para las habitaciones de los chicos, acolchados, reposeras para los padres, entre otras cosas.

“A partir de ese 2 de Abril de 2013, sentí que Dios no podría haberme elegido mejor manera de canalizar mi lado solidario que no sea mediante tu personificación. A lo largo del camino fui entendiendo todo… que el poder especial que tenía este Batman era el de transformar esos momentos duros y desesperantes en el htal (hospital), por momentos de alegría y emoción; que no podía caerme ante cada camita vacía por partida de ángeles; que mucha gente de bien necesitaba confiar y me había elegido para depositarla; que la misión no era solo las visitas al htal sino obras también, que éste era el alimento más nutritivo para mi niño interior, pero también para crecer y ser mejor persona para el adulto que soy”, escribió en un pasaje de la carta de despedida.

En su reflexión final, dio cuenta de una década de accionar coherente, no sin escollos y dificultades: “Querido amigo, acabo de ponerme tu traje por última vez y realizar también mi última visita al htal, es hora de devolvértelo con la satisfacción de hacerlo de la manera en que me comprometí el día que asumí vestirlo… Impoluto por manejarme siempre de una manera transparente y honesta con cada peso que se me confió. Pulcro por no haber permitido nunca que se lo ligue a ningún fanatismo ya sea equipo de fútbol, partido político, etc. Intachable por no haber cedido a beneficios personales en nombre del personaje. Solidario por haberme detenido ante cada niño, adulto o periodista que solicitó algo que estaba a mi alcance. Digno por no permanecer en lugares en donde no se valoró el esfuerzo que esto demanda. Obstinado por tratar siempre de ser ejemplo antes de exigir, pedir o sugerir algo.  Coherente por pensar, decir y hacer en el mismo sentido. Por supuesto que manejarse de esta manera durante 10 años, ocasiona tener que vivir momentos no tan agradables, como por ejemplo tener que reemplazar personas, enfrentarse con firmeza para defender la postura que se cree correcta, denunciar lo que no se hace bien en vez de no involucrarse, soportando por ello hasta una amenaza que desestimé y nunca hice pública”.

Batman Solidario ha sido en estos diez años un personaje que se hizo querer por toda la comunidad de la ciudad de La Plata. A partir de ahora, en su nueva etapa, ya sin traje y sin hacer rodar su Batimóvil, seguramente seguirá haciendo el bien pero con su nombre, bregando como ha hecho siempre por las causas justas y la ayuda desinteresada al prójimo.

La carta completa