Además, lleva a cero la retención para maní, sorgo, maíz pisingallo, cebada, sémola, harina de maíz, entre otros productos ecológicos o biológicos. Buscan favorecer las economías regionales.
El Gobierno eliminó las retenciones a las exportaciones del campo para productos ecológicos y biológicos y bajó las de cereales con certificación orgánica que beneficia a las economías regionales.
La medida que entrará en vigencia a partir de enero próximo fue dispuesta a través del Decreto 851/2021, que lleva la firma del presidente Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, Juan Manzur y los ministros de Economía, Martín Guzmán; Agricultura, Julián Domínguez y de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
El decreto suprime la alícuota del derecho de exportación para los productos que revistan la condición de ecológicos, biológicos u orgánicos, debidamente certificados y autorizados por el organismo competente. La medida reduce también en cinco puntos la alícuota del derecho de exportación para trigo, soja y maíz que tengan certificación orgánica.
Según la disposición oficial se reduce a cero a partir de 2022 las retenciones al maní, sorgo, maíz pisingallo, cebada, sémola, harina de maíz, entre otros productos. En los fundamentos de la medida el Gobierno sostuvo que “la demanda de alimentos orgánicos representa un mercado con alto potencial de desarrollo a nivel nacional y se encuentra en crecimiento a nivel internacional”.
El decreto recuerda que en el 2020 y 2021 “se fueron reduciendo las alícuotas del tributo para distintos productos y aún quedan pendientes algunas modificaciones ya que siguen existiendo bienes finales de economías regionales que tributan Derechos de Exportación”.
En los considerandos del decreto el gobierno sostuvo que “los productos a incluir en la presente medida, se consideraron aquellos productos agropecuarios de las economías regionales que implicaran un bajo o nulo impacto en los precios internos”.
“Resulta conveniente, en consecuencia, incentivar la producción y exportación de alimentos diferenciados por su modo de producción, acorde al criterio de fomentar mayor producción de alimentos con valor agregado”, agrega el decreto.
El Gobierno También fundamentó la medida “con el fin de promover el desarrollo e incentivo de la producción y la agregación de valor nacional y de las exportaciones de las cadenas productivas con mayor presencia territorial y potencial de creación del empleo”.
El artículo uno del decreto establece que a partir del primero de enero próximo la medida alcanza a las mercaderías comprendidas en las posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del Mercosur. (DIB)