El Frente de Todos acompañará un proyecto del rionegrino Alberto Weretilneck que reduciría a cinco años el mandato y se cambiaría la exigencia de dos tercios de los votos para la designación y remoción del jefe de los fiscales. En el Gobierno creen que la jugada pone en riesgo el pliego de Daniel Rafecas
El kirchnerismo en el Senado podría avanzar con un proyecto de ley para acortar a cinco años el mandato del Procurador General y bajar la mayoría requerida tanto para su designación como para su remoción de los dos tercios exigidos en la actualidad a una mayoría absoluta, es decir a la mitad más uno de los miembros del Senado. Una vez más el oficialismo podría apelar a un proyecto de un senador de otro partido, en este caso del ex gobernador rionegrino Alberto Weretilneck.
Según supo Infobae, el único senador de Juntos Somos Río Negro, que en su momento presentó también un proyecto para modificar el Consejo de la Magistratura, redactó una iniciativa a la que algunos senadores del Frente de Todos le dieron el visto bueno. Si así fuera, el kirchnerismo volvería a evitar la responsabilidad de presentar un proyecto propio. Mientras tanto, los senadores prometieron esperar la propuesta que elevará al presidente Alberto Fernández el consejo de juristas conformado precisamente para analizar la ley del Ministerio Público Fiscal y la composición y funcionamiento de la Corte. Esa comisión tiene un plazo hasta el próximo 18 de noviembre.
“Va en la línea de lo que estábamos tratando”, señaló una fuente mientras que otra fuente oficial que no responde al cristinismo respondió que “lo del rionegrino va en la buena dirección”. Cerca de la Vicepresidenta en cambio, aseguraron no tener novedades al respecto mientras que otros alertaron que la iniciativa no permitiría acercar posiciones.
En las últimas dos semanas una docena de juristas pasaron por la comisión de Justicia y Asuntos Penales que preside el neuquino Oscar Parrilli. Todos los expositores, convocados por oficialismo y oposición, coincidieron en la necesidad de acortar el mandato del Procurador que hoy es vitalicio mientras que unos pocos aconsejaron hacer coincidir el plazo del jefe de los fiscales con el del Presidente de la Nación y relativizaron la inconveniencia de la influencia política en la lucha contra los delitos federales. La próxima reunión, la última con especialistas, será el lunes 16, dos días antes del informe de los juristas del Presidente.
Sorpresivamente, Parrilli citó hace un par de semanas a la comisión de Justicia para discutir tres proyectos de Martín Lousteau y de Lucila Crexell sobre la reforma de la ley del Ministerio Público Fiscal y del Ministerio Público de la Defensa. Tras acceder al debate los dos senadores acordaron con Juntos por el Cambio dar marcha atrás y retirar sus iniciativas. En el recinto el kirchnerismo sometió a votación el planteo e impuso su mayoría. De esta manera, y a pesar del reclamo opositor, la comisión de Justicia inició el tratamiento de los proyectos con la idea de allanar el camino de la designación del procurador. El Frente de Todos no tiene los dos tercios requeridos, como tampoco los tuvo Mauricio Macri para nombrar a Inés Weinberg de Roca, por lo que sigue en el cargo el interino Eduardo Casal desde la renuncia de Alejandra Gils Carbó.
Tras discusiones entre ambas bancadas, Weretilneck sondeó al oficialismo con el borrador de su idea. Tras haber sido presentada en forma digital esta tarde, el bloque K podría incorporarla al debate de la comisión en la próxima reunión del lunes. Incluso hay quienes querrían dictaminar la próxima semana para lograr la media sanción antes del fin de las sesiones ordinarias. “No hay que apresurarse, estamos escuchando todo”, se mostró prudente un allegado a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En el Senado hay quienes aseguran que la estrategia K de modificar la ley no es compartida por la Casa Rosada porque pone en riesgo el pliego de Daniel Rafecas. En cambio hay quienes recuerdan que hace siete días Parrilli almorzó con el presidente Alberto Fernández que ya le había pedido otra marcha atrás cuando en el debate por la reforma judicial le hizo quitar un artículo respecto a las “presiones mediáticas» sobre el Poder Judicial. En aquel momento Parrilli accedió. Y ahora, tras el almuerzo en Casa de Gobierno, evitó las declaraciones públicas al mismo tiempo que se mostró dialoguista en la reunión de comisión del martes donde agradeció los aportes de los expertos de la oposición.
“Si el Presidente no estuviera de acuerdo, el proyecto de ley no podría ser tratado en Extraordinarias porque él mismo debe incluirlo en el temario”, reflexionó otro senador.
También Máximo Kirchner pasó por la Rosada y este lunes estuvo en Economía con Martín Guzmán, en la víspera de la llegada de la misión del FMI. Respecto a las modificaciones de la ley, Sergio Massa dijo que en Diputados hará lo que le indique el jefe de Estado. De hecho hay varios proyectos que aún votados en el Senado en trámite exprés, no tuvieron ni siquiera inicio en comisiones en la cámara baja. Por ejemplo: la reforma judicial.
Desde el Gobierno se reafirmó que el candidato a Procurador es, sigue siendo y será Daniel Rafecas. El juez anticipó que no querría asumir sin los dos tercios de los votos algo que aún cambiando la ley podría suceder si Juntos por el Cambio accede al pedido de Elisa Carrió y acompaña el pliego. Pero además hay un tema más importante que los dos tercios para la designación y es la flexibilización de los dos tercios para la remoción: con sólo 37 votos alcanzaría para echar a un Procurador.
Este martes el profesor emérito Néstor Sagües alertó al respecto. Dijo que cambiar la mayoría calificada por mayoría absoluta para hacer un juicio político al jefe de los fiscales sería una virtual amenaza que derivaría en una situación de “sumisión o pleitecía” o dejaría en una condición de “fragilidad” a quien ocupe el cargo frente a los legisladores.
Qué dice el proyecto
El proyecto de ley de Weretilneck sustituye el artículo 11 de la Ley 27.148 y establece que “el Procurador General de la Nación será designado por el Poder Ejecutivo Nacional con acuerdo del Senado por mayoría absoluta de sus miembros. Para ser Procurador General de la Nación se requiere ser ciudadano argentino con título de abogado de validez nacional, con ocho (8) años de ejercicio, y reunir las demás calidades para ser senador nacional”.
La mayoría requerida para la designación va enlazada con el cambio en el plazo del mandato y así lo plantearon senadores como Parrilli, María de los Angeles Sacnun y el también rionegrino Martín Doñate en la comisión. Doñate, de La Cámpora, es el titular de la Bicameral de Seguimiento del Ministerio Público Fiscal y el más incisivo con la gestión de Casal contra quien habilitó una serie de investigaciones por presunto mal desempeño. En el texto de Weretilneck se incorpora a la ley 27.148 el artículo 62 bis que establece una duración de cinco años y la posibilidad de una única reelección consecutiva, siempre a propuesta del Poder Ejecutivo Nacional y con la condición de que vuelva a pasar por el Senado para que preste un nuevo acuerdo.
El trámite es extenso. En el hipotético caso de que se aprobara la ley, se promulgara (lo que debe hacer el Presidente) y se designara un nuevo Procurador con estas condiciones, el jefe de los fiscales arrancaría su gestión en el segundo año de gobierno del Presidente y lo completaría promediando la mitad del siguiente mandato con lo cual el plazo no coincidiría con la gestión política, un riesgo para la independencia de las investigaciones según indicaron seis especialistas este martes. En ambas cámaras la ley requiere mayoría simple, un número que en Diputados el oficialismo no alcanza, excepto con acuerdos con otras bancadas.
El texto propone otro cambio muy discutido: la remoción del Procurador y del Defensor. “Podrán ser removidos por causa de ineptitud o mala conducta, previo sumario administrativo con audiencia del interesado, según el procedimiento establecido reglamentariamente”, señala el proyecto de ley.
La propuesta apuna a que la remoción pueda ser impulsada por el propio Poder Ejecutivo con acuerdo del Senado por mayoría absoluta de sus miembros. “Mientras ese proceso se desarrolla, el Procurador será suspendido aunque el Senado podrá revocar la suspensión en el plazo máximo de diez hábiles contados a partir se tomada la decisión”, se indica.
También los diputados pueden pedir su remoción con aprobación de la mayoría absoluta y con acuerdo del Senado por mayoría absoluta de sus miembros.
Una vez aprobada dicha iniciativa de remoción en la Cámara de Diputados, el Procurador General de la Nación queda suspendido inmediatamente del ejercicio del cargo mientras dure el proceso de remoción.
Con excepción del Procurador General de la Nación, los demás magistrados que componen el Ministerio Público Fiscal de la Nación podrán ser removidos de sus cargos únicamente por el Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público Fiscal de la Nación. Ese tribunal de enjuiciamiento estará integrado por nueve miembros.
El rionegrino Weretilneck acompañó con su voto varias iniciativas de Frente de Todos, entre ellas la reforma judicial (consiguió que Parrilli cediera una cámara a crear en Neuquén y en cambio se la asignara a General Roca, en Río Negro) y también la estrategia del kirchnerismo para dejar sin efecto los traslados de los jueces Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Germán Castelli.
Ayer, justo a la misma hora que el ex gobernador presentaba el proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal, con todo el punteo que agrada a la bancada oficialista, su ex ministro Luis Di Giacomo, diputado nacional, pedía un apartamiento de reglamento en la sesión de la cámara baja. Di Giacomo generó un fuerte cruce entre Sergio Massa y Mario Negri por interrumpir el debate de consenso con una planteo disruptivo: solicitó debatir en el Congreso la cancelación de las PASO del año próximo. El jefe del interbloque de Juntos por el Cambio manifestó su sospecha sobre el planteo del rionegrino. (Fuente: Infobae)