“El penal de Marcos Paz no tiene agua y hay riesgo de amotinamiento”: La grave denuncia de la esposa de De Vido

Alessandra Minnicelli, la esposa del ex ministro de Planificación Federal que se encuentra detenido en aquel complejo penitenciario, detalló en un audio de WhatsApp que fue viralizado, en qué condiciones se encuentran los internos.
La cárcel de Marcos Paz donde está detenido el exministro de Planificación Federal no tiene agua hace cuatro días y “hay riesgo de amotinamiento”. Así lo denunció públicamente su esposa, Alessandra Minnicelli, en un audio de Whastapp que terminó viralizandose.
En el audio, detalla las condiciones precarias en las que conviven los internos del penal donde tampoco tienen calefacción ante las bajas temperaturas y, afirmó: “están tomando agua del extintor de incendios”. Por lo que alertó: «Se puede provocar un incendio y no habrá agua para apagarlo».
“Esto significa que ante la violencia que hay por hacinamiento en todos los pabellones que se genera también por no tener la disponibilidad de tener agua, esto es riesgo también de amotinamiento, y ante el riesgo de amotinamiento que puede provocar un incendio también y que la boca de extracción de incendio se está tomando puntualmente el agua para los módulos, puede haber un incendio y no hay agua para apagarlo”, agregó e insistió con resaltar las gravedad del caso por el que ya planteó un hábeas corpus, un amparo.
La denuncia de Minnicelli va en sintonía con la denuncia de la Liga Argentina por los Derechos Humanos que además exige “la inmediata solución de la situación que viven todos los presos en la cárcel de Marcos Paz”.
En el comunicado publicado ayer martes, el organismo confirma las palabras de la esposa de De Vido. “Desde hace cuatro días no hay agua”, y continúa: “La población del penitenciario está bebiendo agua del tanque de incendio, es decir que está agotándose el suministro de agua para una emergencia. Esto deja tanto al personal de la cárcel como a todos los detenidos completamente desprotegidos en caso de un siniestro”.
Asimismo agregan que “las temperaturas descienden y más en zonas suburbanas. Ya las cárceles federales están superpobladas y, por ende, todas sus instalaciones resultan insuficientes para un mínimo de dignidad en el hábitat de los presos, ¿ahora pretenden obligarlos a pasar el invierno a temperaturas de mazmorras?”.
Por tal situación de hacinamiento y precariedad, se interpusieron todas las acciones legales que corresponden a esta grave situación que tienen que resolver las autoridades inmediatamente.