El organismo precisó que la distancia entre quienes más y menos ganas creció de 21 a 23 veces
La brecha entre ricos y pobres se incrementó de 21 a 23 en el primer trimestre de 2020 según el promedio de ingresos con el que se mide el índice de Gini, que marca el grado de desigualdad existente en una sociedad.
Si bien el índice marcó una leve mejora con respecto al primer trimestre de 2019 (de 0,447 al 0,444), si se toma el promedio de ingresos por decil, la brecha entre el sector que menos gana y el que más aumentó de 21 a 23 veces.
Para elaborar esta estadística, se divide a la población según sus ingresos monetarios, en 10 partes iguales (deciles). Luego se realiza un promedio de los ingresos de cada uno de esos sectores, y allí se calcula la diferencia entre unos y otros. En tanto, el índice de Gini (una medición mundialmente utilizada) mide la distribución de los ingresos de forma tal que 0 es “total igualdad” y 1 “total desigualdad”).
En el caso de los ingresos, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) indicó que el primer decil tuvo un ingreso medio de $ 3.986, mientras que el decil de más poder adquisitivo promedió $ 100.099.
En tanto, el informe sostiene que el 60% de la población ocupada ganaba hasta $ 29.000 al término del primer trimestre del año. Respecto a la población ocupada, el Indec informó que se registró un ingreso promedio de $ 28.497 y un ingreso mediano de $ 24.000.
El Indec explicó también que el ingreso promedio per cápita de la población, más allá de si está ocupado o no, alcanzó los $19.916, mientras que la mediana del ingreso per cápita fue de $14.500. (DIB)