Cristina Castro, la madre de Facundo Astudillo, declaró hoy durante cuatro horas como testigo en la causa en la que se investiga la desaparición y muerte de su hijo.
La mujer volvió a apuntar contra el accionar del personal de la Policía de la provincia de Buenos Aires y el fiscal federal de Bahía Blanca inicialmente a cargo del expediente, Santiago Ulpiano Martínez.
Según precisó la agencia estatal Télam, Cristina prestó su testimonial por videoconferencia entre las 9 y las 13, pero no lo hizo ante Ulpiano Martínez sino ante los dos fiscales que se sumaron semanas atrás a la investigación del caso: Andrés Heim, de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin); y Horacio Azzolin, jefe de la Unidad Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci).
Por su parte, Leandro Aparicio, uno de los abogados de Castro, aclaró en declaraciones televisivas que ella “pidió que no esté presente Ulpiano Martínez”, porque a su criterio este funcionario “quiere ahondar en la teoría del suicidio ya que nunca tomó la teoría de la desaparición forzada”.
Según precisaron fuentes judiciales, “Cristina contó todo desde que denunció la desaparición hasta el hallazgo del cuerpo y mantuvo la misma línea de críticas que ya había hecho públicamente”.
En ese extenso relato la mujer también se refirió al amuleto que supuestamente pertenecía a su hijo y que fue encontrado en el puesto de vigilancia policial de Teniente Origone. Se trata de una pequeña sandía de madera que contiene una vaquita de San Antonio. Este objeto fue hallado durante un allanamiento realizado a principios de agosto en la dependencia policial de la mencionada localidad lindera Mayor Buratovich, donde el joven fue visto con vida por última vez.
En tanto, para mañana está previsto que declaren un testigo que, de acuerdo con la querella, le mencionó la policía bonaerense a la denominada “testigo H”, quien, a su vez, dijo haber llevado a Facundo en su auto desde Teniente Origone hasta el cruce de la ruta nacional 3 y las vías del ferrocarril. Para los abogados de Cristina, esta testigo fue “plantada” justamente para favorecer a los efectivos policiales de esa zona.
Facundo fue visto con vida por última vez el 30 de abril último, cuando dejó su casa de Pedro Luro para ir a Bahía Blanca a ver a su exnovia. En el trayecto fue detenido en, al menos, un control policial por violar el aislamiento, aunque se lo dejó continuar y, según cree su madre, tras ello fue desaparecido por la Policía bonaerense.
El pasado 15 de agosto los restos óseos de Facundo fueron encontrados semienterrados en un cangrejal de General Cerri, en el partido de Villarino. El cotejo de ADN y su identificación se conoció la semana pasada. (DIB) AR