El oficialismo no habría alcanzado los votos necesarios para aprobar los artículos sobre la eliminación de la eximición del pago de Ganancias al Poder Judicial y sobre las retenciones al sector agropecuario.
La Cámara de Diputados se encamina a aprobar ya en la madrugada del miércoles el proyecto de Presupuesto 2023, con el voto los legisladores del oficialismo, de bloques provinciales y del radicalismo.
El oficialismo parece tener garantizada la sanción de la iniciativa diseñada por el Ministerio de Economía, ya que cuenta con el respaldo de los legisladores del Frente de Todos, del Interbloque Provincial, del interbloque Federal, de Ser, Evolución Radical y Encuentro Federal.
El bloque radical -que preside Mario Negri- aún faltaba definir si votaba en general o se abstenía. En caso de que la UCR se pronuncie de manera afirmativa, el dictamen de mayoría en general podría alcanzar alrededor de 170 votos.
No obstante, el oficialismo no habría alcanzado a negociar los votos necesarios para aprobar los artículos sobre la eliminación de la eximición del pago de Ganancias al Poder Judicial y sobre las retenciones al sector agropecuario.
Más allá de estas modificaciones al texto original, el Gobierno decidió mantener el espíritu del proyecto, con una proyección de crecimiento del 2 por ciento del PBI, un déficit del 1,9 por ciento, un dólar promedio de 219 pesos y una inflación promedio del 60 por ciento para 2023.
El proyecto estima un gasto total de casi $29 billones, con una recaudación aproximada de $22,5 billones y un déficit primario de $6,3 billones.
La titular de la Cámara baja, Cecilia Moreau, abrió la sesión a las 13.45 con la presencia de 130 legisladores.
El oficialismo pudo reunir el quórum con el aporte de bloques provinciales y del radicalismo, lo que determinó que de manera inmediata se iniciara el debate en el que están anotados para exponer cien legisladores.
La discusión del Presupuesto 2023 estuvo atravesada por el debate sobre la eliminación de la exención en el pago del impuesto a las Ganancias con el que cuenta en la actualidad el Poder Judicial.
Otro de los temas de discusión fue la pauta proyectada de inflación del 60 por ciento, junto con la cuestión de las retenciones y la distribución del gasto social y educativo.
Al abrir el debate, el presidente de la comisión de Presupuesto Carlos Heller afirmó esta tarde que el proyecto de gastos y recursos impulsado por el oficialismo para 2023 “no es un presupuesto de ajuste” y rechazó que hayan disminuido las partidas destinadas a gastos sociales, al señalar que suman más de 300.000 millones de pesos.
Al exponer como miembro informante de la mayoría, Heller aseguró que el Presupuesto 2023 “está orientado a la inversión en infraestructura, a fortalecer el sistema de salud, la educación en todos los niveles, la extensión de las becas, la ciencia e innovación y el fomento del empleo”.
Desde la oposición, el diputado del PRO Luciano Laspina afirmó que el Presupuesto 2023 impulsado por el oficialismo “se queda a mitad de camino porque no prioriza el gasto y gasta en cosas que no debe” y en ese sentido cuestionó el beneficio al gremio de camioneros para que no paguen el impuesto a las ganancias sobre determinados conceptos como viáticos.
Laspina, que además es vicepresidente de la comisión de Presupuesto de la Cámara baja, manifestó que “a la Argentina ya no le alcanza con el equilibrio fiscal, le hace falta superávit fiscal”.
Los diputados de las bancadas libertarias, Javier Milei y José Luis Espert ratificaron esta tarde que rechazarán el proyecto de Presupuesto 2023 al cuestionar los gastos previstos, el nivel de endeudamiento, el déficit fiscal y la proyección de inflación para el próximo año.
Milei dijo que “por cuestiones de índole moral, técnicas y por las inconsistencias confesadas por los propios diputados del oficialismo desde la Libertad Avanza vamos a rechazar rotundamente este Presupuesto”.
Por su parte, el economista y legislador de Avanza la Libertad, José Luis Espert, afirmó que “nunca un gobierno endeudó a un Estado más que el de Alberto Fernández: 100.000 millones de dólares, sin considerar la deuda cuasifiscal que ya llega a 8,6 billones, y con estos niveles de tasas de interés, el año que viene se va a duplicar para llegar a la friolera de 17 billones de pesos”.
La diputada nacional por el Partido Obrero en el Frente de Izquierda y de Trabajadores-Unidad, Romina del Plá, afirmó que “de la mano de este presupuesto la crisis social se va a profundizar” y que “hay una clara política de Estado contra las masas laboriosas, de endeudamiento en dólares y en pesos, de tasas astronómicas de interés, de achicamiento del gasto público social”.
Puntos clave
El dictamen de mayoría contiene reformas impositivas ya que se contempla aumentos en las cuotas de obra social para las categorías más altas del Monotributo, incremento de impuestos internos y de aranceles de productos electrónicos, un impuesto sobre los pasajes aéreos y deducciones de ganancias en concepto de educación.
Otro punto significativo es la inclusión de una cláusula por la cual si aumenta la recaudación o la inflación prevista del 60% en 2023, se deberá implementar una corrección en el Presupuesto, a fin de establecer cómo se redistribuirá ese excedente de los recursos.
En ese sentido, establece que si “al 31 de agosto la tasa de inflación superara el 10% la meta establecida en el Presupuesto o los ingresos superan el 10%, el Poder Ejecutivo enviará una ley complementaria”.
Otro punto es la posibilidad de blanqueo de dólares para el pago de importaciones de insumos y servicios destinados a procesos productivos, y para la construcción de proyectos inmobiliarios como así también para la adquisición de viviendas usadas, entre otras iniciativas. (DIB) ACR