El negocio de las remesas —el envío de dinero desde y hacia la Argentina—viene creciendo a un ritmo importante en los últimos años. Un incremento acelerado que, hasta hace apenas un año atrás, respondía tanto al mayor flujo de dinero desde el país hacía otros países del exterior, como también al aumento de la cantidad de argentinos que viven afuera y envían dinero a sus familias. Sin embargo, la profundización de la crisis económica local ha cambiado en forma drástica esa ecuación.
En rigor, según datos que maneja la empresa Western Union-Pago Fácil, pero que también son relevados por el Indec y el BCRA, es record histórico la cantidad de dinero que los argentinos en el exterior envían a sus familias residentes en la Argentina. En los últimos doce meses, según cifras de la compañía, los envíos de dinero hacia la Argentina se han duplicado.
“Desde la devaluación de agosto del año pasado la tasa de crecimiento de entrada de transacciones desde el exterior ha crecido en forma inmensa, no sólo medida por la cantidad de transacciones, sino también por los montos que se envían. Estamos en el pico histórico, nunca antes se recibió tanto dinero en el país en concepto de remesas”, explicó Maximiliano Babino, gerente general de Western Union-Pago Fácil, una de las empresas que gestionan estos movimientos de dinero.