El infectólogo dijo esperar que los casos de coronavirus empiecen a disminuir, a más tardar, hacia la segunda semana de agosto ya que, de trasladarse a septiembre o a octubre, se estará en problemas
Eduardo López, integrante del comité que asesora al Ministerio de Salud, estimó hoy que la Argentina está «transitando hacia el pico» o ya se encuentra en él, y dijo esperar que los casos de coronavirus empiecen a disminuir, a más tardar, hacia la segunda semana de agosto ya que, de trasladarse a septiembre o a octubre, se estará «en problemas».
En diálogo con Télam Radio, el también jefe del Departamento de Medicina en el Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, aclaró que, «si bien el pico es un día, en general, la mayor cantidad de casos se da siempre en un período, que según la experiencia de los países europeos, es alrededor de 8 a 10 días»
«Luego hay un escalón de otros 10 días aproximadamente, a veces 12, y después recién ahí empieza la curva de bajada más rápida», señaló.
Según interpretó López, en estos momentos hay «un promedio de 5.200, 5.300 casos por día, en los últimos 7 a 10 días», un «evidente número alto de casos».
«Estamos con muchos casos. El sistema de terapia intensiva está dentro de una cifra adecuada. Aún asumiendo que fallezca algún paciente siempre es una catástrofe, pero los números son los números», argumentó.
En ese sentido, dijo no creer que «el pico pase mucho más de estos días».
«Ojalá no me equivoque porque, si el pico se traslada a septiembre o a octubre, ahí sí vamos a estar en problemas. La clave es que lleguemos lo más pronto al pico para empezar a estabilizar y empezar lentamente a bajar la curva», apuntó.
Sobre la situación epidemiológica en el país, señaló que hay «ciudades del interior que, por casos importados, que han ido del AMBA, están con muchos casos».
«Hay varias provincias que han tenido rebrotes que se dan porque llegan individuos sin completar los períodos de cuarentena, y con algunos síntomas, entonces transmiten la enfermedad», dijo López.
Consultado sobre las decisiones que deberán tomar desde el Gobierno de cara al inicio de una nueva fase de las medidas restrictivas por la pandemia el próximo lunes, el infectólogo estimó necesario apuntar a la «responsabilidad individual porque, finalmente, uno no puede mantener una cuarentena 100 años, por decir alguna cifra estrambótica, pero para que la gente entienda».
«La gente tiene que salir a trabajar y tiene que mantener el distanciamiento social, el uso de barbijo, y evitar las reuniones donde se acumula gente. Este es un dato que es fundamental», agregó.
En ese mismo sentido, reconoció que mantener la cuarentena implica que «la gente se cansa, la incumple, tiene fatiga, se fastidia, y con razón, y además tiene que hacer actividad productiva».
«Por lo tanto, llega un momento en que uno tiene que tener responsabilidad social. Tenemos que ser maduros, tenemos que acompañar a la sociedad en esto, y a su vez, pedirle a cada individuo que haga autocuidado para a su vez cuidar a los demás», afirmó. (Telam)