Seguidores del exmandatario de Brasil Jair Bolsonaro, invadieron el Palacio del Planalto, el Congreso Nacional y el Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema), en Brasilia.
El canciller Santiago Cafiero expresó su “solidaridad” con el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y manifestó su “defensa de la democracia” en ese país ante los intentos golpistas y las manifestaciones violentas de los seguidores del exmandatario Jair Bolsonaro.
“Frente a las acciones golpistas de la derecha en Brasil, manifestamos nuestra solidaridad con Lula”, dijo Cafiero en su cuenta de Twitter.
El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, rechazó los actos de violencia institucional que se están llevando adelante en Brasilia contra los tres poderes” y respaldó al presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva para “restablecer el orden democrático” en ese país.
“Expreso mi más enérgico repudio a los actos de violencia institucional que se están llevando adelante en Brasilia contra los tres poderes”, afirmó Scioli en su cuenta de Twitter ante los intentos golpistas y las manifestaciones violentas de los seguidores del exmandatario Jair Bolsonaro que se suceden en ese país. Y agregó: “Confío en la experiencia del presidente Lula da Silva, quien restablecerá el orden democrático”.
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, criticó al bolsonarismo por “no aceptar las reglas de la democracia” y envió su apoyo al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva. “El bolsonarismo no acepta las reglas de la democracia y ahora promueve un golpe de Estado”, escribió el ministro en su cuenta de Twitter, y añadió: “Todo nuestro repudio a los violentos y solidaridad con Lula y el pueblo de Brasil”.
La presidenta de la Cámara de Diputados de la Nación, Cecilia Moreau, repudió la toma del Congreso de Brasil por parte de activistas bolsonaristas y expresó su solidaridad para con el presidente Lula Da Silva.
“Como presidenta de Diputados repudio de manera enfática la toma del Congreso Nacional de Brasil y le expreso toda mi solidaridad al presidente Lula”, dijo la legisladora en su cuenta de Twitter. Cecilia Moreau añadió que “estas acciones demuestran que la democracia se enfrenta al odio y que debemos combatir la intolerancia con más diálogo”.
El ministro de Economía, Sergio Massa, repudió “enérgicamente” hoy “los actos de violencia y el asalto a las instituciones democráticas en Brasil” y manifestó su “solidaridad para con el gobierno y el pueblo brasileños”. “Repudio enérgicamente los actos de violencia y el asalto a las instituciones democráticas en Brasil. Hechos como estos atentan contra la democracia y la voluntad popular”, dijo Massa en Twitter.
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, también expresó su “profunda preocupación por el asalto a las instituciones de la democracia en Brasil” y se solidarizó con el presidente de ese país Luiz Inácio “Lula” Da Silva.
“Profunda preocupación por el asalto a las instituciones de la democracia en Brasil. Mi condena absoluta a la acción violenta y mi total solidaridad y apoyo a Luiz Inácio Lula da Silva y a todo el pueblo de Brasil”, expresóen Twitter.
El diputado nacional radical Mario Negri expresó hoy su “absoluto repudio” a los intentos golpistas de los seguidores de Jair Bolsonaro en Brasil y deseó que “prevalezca el orden y la democracia” en el vecino país. “Expreso mi absoluto repudio al asalto violento de las instituciones en Brasilia. ¡Espero que prevalezca el orden y la democracia en todo Brasil!”, escribió en Twitter.
Miles de seguidores del exmandatario de Brasil Jair Bolsonaro, que defienden un golpe de Estado para derrocar al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, invadieron hoy el Palacio del Planalto, el Congreso Nacional y el Supremo Tribunal Federal (STF, corte suprema), en Brasilia, prácticamente sin resistencia de la policía de la capital federal.
Lula se encontraba en Araraquara, interior de San Pablo, en una visita prevista en agenda desde el viernes para ver zonas de desastre causados por las lluvias, mientras algunos manifestantes llegaron hasta la puerta del Palacio del Planalto, la sede del gobierno, según mostró el canal GloboNews.
Los manifestantes rompieron vidrios, cámaras de seguridad, armarios y despachos en el Planalto y el STF.
Llegaron en caravanas de todo el país, mientras Bolsonaro se encuentra en Orlando, Estados Unidos, adonde viajó tras abandonar el poder.
“Estos actos antidemocráticos deben sufrir el rigor de la ley”, afirmó el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco.
La situación fue comparada con la invasión al Capitolio, el Congreso de Estados Unidos, en enero de 2020 para desconocer la derrota electoral del entonces presidente Donald Trump, aliado de Bolsonaro.
La presidenta del Partido de los Trabajadores (PT) gobernante, Gleisi Hoffmann, acusó al gobernador de Brasilia, Ibaneis Rocha, un aliado de Bolsonaro, de haber liberado la zona para permitir el avance de los golpistas. (DIB) ACR