Unos 23.000 argentinos que tenían pasaje de regreso al país están varados hasta hoy en diferentes lugares del mundo por la pandemia del coronavirus. En ese contexto, el Gobierno admitió que el operativo para traerlos de regreso se complicó por el cierre de fronteras en Europa.
Según detallaron a Infobae funcionarios de Cancillería, el Gobierno está desplegando un operativo de contención en más de 55 consulados alrededor del mundo para atender el reclamo de los miles de argentinos que quieren volver al país.
Hasta ahora hay cinco vuelos programados de Aerolíneas Argentinas para regresar entre el 19 y 20 de marzo desde Miami y Madrid, con un grupo de gente que está en el exterior. Pero también adelantaron en el Gobierno que desde el Ministerio de Transporte se negocia con empresas aéreas de otros países para que dispongan de los vuelos programados de regreso a Buenos Aires.
“Esta negociación con las compañías privadas aéreas se hace difícil porque no quieren perder dinero con vuelos que regresarán vacíos a sus lugares de origen”, dijeron las fuentes oficiales consultadas.
En tanto, desde la Cancillería describieron a Infobae las dificultades que tiene el “operativo de rescate”: por ejemplo, el canciller Felipe Solá dialogó ayer con autoridades de Marruecos y de España porque hay un grupo grande de argentinos varados en el país africano, pero los españoles no los dejan entrar para poder regresar a la Argentina vía Madrid.
En tanto, hay muchos argentinos que se encuentran en otras capitales de Europa pero que no se pueden trasladar a Madrid o a Roma porque no los dejan ingresar y así pierden los vuelos disponibles de Aerolíneas Argentinas de regreso al país, vía Madrid.
“La situación es desesperante para los que están varados en el exterior, pero hay que llevar calma y mantener el operativo de contención como corresponde”, dijo un funcionario de la Casa Rosada.
En tanto, se supo que ayer el presidente Alberto Fernández, por ejemplo, dialogó con su par de Perú, Martín Vizcarra, por un grupo de 100 argentinos varados allí que no tienen forma de regresar.
El otro caso complicado se registra en diferentes cruceros que circulan en estos momentos por distintos lugares del mundo, ya que no se les permite bajar en los puertos.