La Iglesia realizó un llamado a que «todos los actores sociales» se comprometan «en un diálogo responsable y creativo» orientado a «revertir esta difícil situación social», en el cierre de la Semana Social que organiza todos los años la comisión episcopal de Pastoral Social en esta ciudad.
La lectura de las conclusiones del encuentro de tres días estuvo a cargo del obispo de Lomas de Zamora y titular de la Pastoral Social, Jorge Lugones, quien transmitió el pedido a los distintos sectores de «poner los mejores esfuerzos personales e institucionales para revertir esta difícil situación social de presente y de futuro».
«Humildemente les pedimos a todos los actores sociales, al Estado, los empresarios, los sindicalistas, los movimientos populares, la dirigencia política, las universidades y organismos de ciencia y técnica, que nos comprometamos en un diálogo responsable y creativo, pensando fundamentalmente en el bien común de la patria», puntualizó el documento.
El texto final de este encuentro puso de relieve la cuestión laboral, que dicho sea de paso fue la que dominó esta edición: «Trabajo: clave para el desarrollo humano integral».
Destacó además los cambios pedidos durante el encuentro «en el sistema impositivo para salir del esquema ´confiscatorio que padecemos», así como el llamado a «tener presente que son los trabajadores quienes crean la riqueza y no la riqueza quien crea trabajadores”.
El obispo advirtió que «no alcanza relacionar al trabajo sólo con el capital, sino también y fundamentalmente con la persona, su dignidad y su desarrollo y esto no debería ser un objetivo declamado sino una realidad deseada, buscada y vivida por todos y para todos».
Al abordar cuestiones ecológicas, resaltó el llamado del papa Francisco «a custodiar el hábitat como un legado a preservar de la acción predatoria llevada adelante por el capitalismo de base extractivista, que contamina las aguas, que promueve la tala indiscriminada de árboles sin reparar en las consecuencias climáticas, que degrada los suelos y pone la vida en peligro mediante el uso excesivo de agrotóxicos». (LP)