La actividad física beneficia la salud de todas las personas, cualquiera sea su condición y colabora en mejorar el estado de ánimo. Se recomienda al menos 30 minutos por día.
Es aconsejable dedicar algún momento para activar brazos, tronco y piernas en el espacio que tengamos en nuestros hogares y caminar, trotar y/o saltar combinando movimientos con los brazos. Asimismo se puede sumar algún objeto como pelota, aros, sogas, entre otros, y agregar como fondo música para motivar los sentidos.
De esta manera, se recomienda la participación de los niños y niñas en juegos que impliquen movimientos y desplazamientos como: saltar a la soga, jugar a la escondida, a la pelota, entre otros.
Por otra parte, para quienes recién se inician en la actividad, deben prestar especial atención al cuidado de la postura y aumentar la intensidad progresivamente para no hacerse daño.
Para quienes permanecen varias horas en posición sedentaria, se recomienda tratar de disminuir el tiempo en posición sentada o recostada, poniéndose de pie cada 30 minutos o hacer algún ejercicio mientras se mira televisión.
Asimismo, es óptimo realizar tareas de la casa que impliquen movimiento, como jardinería, limpieza de espacios, subir escaleras, entre otros. De esta manera, nuestra salud física y mental se ve beneficiada cuando nos mantenemos activos.
