La recaudación tributaria aumentó en febrero 40,4%, otra vez muy por debajo de la inflación

Por octavo mes consecutivo el desempeño de la recaudación fue insuficiente para superar los efectos de la aceleración de la inflación que se observa desde mediados de 2018 respecto del año previo, porque salvo el Impuesto sobre los Créditos y Débitos Bancarios, además de las retenciones sobre las exportaciones, en general el pago de los tributos acusa un rezago de 30 a 40 días desde el momento en que se devenga hasta que se ingresa a alguna de las cuentas del organismos: DGI, Aduana y Anses.
La jornada dominada por la apertura de la Asamblea Legislativa en el orden nacional y también provincial llevó al Administrador Federal de Ingresos Públicos, Leandro Cuccioli, a interrumpir el clásico encuentro mensual con la prensa, para difundir y explicar las principales variaciones de los recursos tributarios.
El faltazo no se puede atribuir al mal desempeño de los recursos tributarios, porque el aumento del 40,4%, inferior a la tasa de inflación de los últimos 12 meses en más de 9 puntos porcentuales, es un fenómeno que se inició en julio de 2018, en pleno proceso de fuerte devaluación del peso, receso de la actividad y claras muestras de las inconsistencias que tenía el primer acuerdo con el FMI.
Tan pobre comportamiento estuvo alineado con la acumulación también de 8 meses consecutivos de contracción del mercado de bienes durables, como automotores, motos e inmuebles a estrenar.
Los recursos tributarios alcanzaron $330.890,7 millones, con un incremento interanual del 40,4% en términos generales, del 52,9% en Ganancias y del 43,2% en el tramo impositivo del IVA, informó la AFIP.
En el IVA neto, el aumento fue del 33,6%, con un crecimiento del 43,2% para el tramo impositivo y del 8,9% en el aduanero, pese a que la variación del tipo de cambio en los últimos 12 meses fue de más de 90%, y rigen las retenciones adicionales de $4 para el agro y $3 para los productos industriales que en conjunto aportaron unos $11.100 millones.