Malestar en el Comi Pini por instalación de una antena

No tiene ni planos ni autorización

Patricio Pellizza, vecino del lugar, compartió en Radio UNO las preocupaciones sobre las irregularidades que afirman tuvieron los trabajos realizados hasta el momento.

El intento de colocación de una antena de telefonía celular generó preocupación y malestar entre los vecinos del barrio Comi Pini, motivo por el cual Patricio Pellizza, vecino de lugar, fue entrevistado en Radio UNO 102.1 en donde se refirió a los planteos realizados ante la comuna para dar un freno a la obra.
En diálogo con el periodista Alfredo Perona, el vecino de dicha barriada explicó sobre lo sucedido que “empezamos a ver movimientos en un terreno con máquinas grandes que sacaban alambres y libustrinas, trajeron una retro y comenzaron a hacer una excavación grandes”, aclarando en ese sentido que “averiguamos lo que iban a ejecutar y nos dijeron que iban a instalar una antena para telefonía celular”.
Pellizza detalló en cuanto a los pasos que siguieron los vecinos que “comenzamos a averiguar la legislación local vigente, si se podía instalar o no, nos juntamos los vecinos del barrio, más que nada los de la calle Machado, Saavedra, Bombero Aldabe y Democracia” agregando en ese sentido que “gracias a los concejales y sobre todo a Ramiro Ferrante, nos enteramos que se puede instalar pero con varios recaudos”.
Al referirse a las características del proyecto que comenzó a emplazarse, el referente del barrio señaló que “va a ser una antena de alrededor de 40 metros y con sistema autoportante”, aunque destacó en cuanto a su preocupación “al no haber profesional actuante pedimos la paralización de la obra, porque cuando vas a construir en tu casa aparecen los inspectores, y por eso nosotros solicitamos lo mismo para esta obra”.
En un mismo sentido, Pellizza remarcó que desde la comunidad barrial “queremos saber si hay estudios de suelo hechos, si la estructura está adaptada o no para soportar la antena, y surgió que no había nada presentado en la Municipalidad”, resaltando que “hace dos días apareció un ingeniero, para asesorarse en la Municipalidad sobre qué había que presentar para seguir con la obra”, destacando nuevamente que los vecinos “queremos saber si está todo bien, cómo son los aspectos de seguridad, porque todas las antenas llevan aparatos que son cancerígenos”.
Por otra parte, el vecino recordó en cuanto a los antecedentes de este tipo de antenas y las complicaciones que generan que “a la vuelta de los bomberos hay otra antena igual que con un viento leve hace un sonido terrible, hay interferencia en radio y televisión” haciendo el planteo de “y si se cae la antena quién es el responsable; tampoco sabemos si hubo estudios de impacto ambiental”.
Patricio Pellizza dejó en claro su malestar y el de los vecinos al considerar que la empresa y los encargados de los trabajos “se manejaron como si fuera el patio de su casa” añadiendo en cuanto a esto que “empezaron la construcción en un terreno que ni siquiera tiene dueño sino una posesión, y la compañía un contrato de locación para colocar una antena”. Además destacó que “lo raro de esto es que los obreros no tienen idea de quién los contrató, y todo lo que hacían mandaban fotos por whatsapp para que un ingeniero les diera indicaciones y así laburaron durante tres o cuatro días”.
Por otra parte, remarcó la condición de escondimiento en el que se realizaron las primeras tareas, manifestando que “cercaron toda la vuelta de las casas para que no se pudiera ver”, afirmando al respecto que “en la Municipalidad la arquitecta que me atendió se vio sorprendida por lo que se estaba haciendo, y tampoco sabían nada los concejales”, considerando sobre esto que “me parece extraño que nadie de la Comuna haya visto nada”.
Finalmente, Pellizza comentó que los vecinos en conjunto “presentamos nota al Intendente y a los bloques de concejales para que nos den una respuesta de cómo va a seguir esta situación”; adelantando que desde el barrio “no nos vamos a oponer a que se instale si no cumple con los requerimientos que establecen las diferentes normativas”, indicando finalmente que “no sabemos si hubo algún tipo de arreglo como para que nadie haya visto nada”.