La gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal volvió ayer a pedir el voto a favor del frente Juntos por el Cambio en las PASO del próximo domingo y señaló que la respuesta a los problemas de la inflación o la pobreza no se van a resolver yendo «para atrás». «Para atrás es viajar en un tren sin freno automático y que te pase la tragedia de Once», afirmó.
«Para adelante -agregó- es que todos los trenes metropolitanos tengan freno y que se abran tres talleres ferroviarios después de 20 años y que le den trabajo a 200 personas».
La mandataria provincial, además, aseguró que el Gobierno no evalúa impulsar una reforma laboral y previsional, y admitió que durante su gestión tuvo «mucho miedo», sobre todo por los cambios implementados en la policía bonaerense. «Había y seguramente sigue habiendo situaciones de corrupción, pero no hay impunidad, de eso estoy segura», afirmó en declaraciones al canal América.
Sobre los comicios del domingo, señaló: «Más allá de las encuestas, cuando la gente esté en el cuarto oscuro sabe quién va cuidar a sus hijos, quién los va preservar de la droga, quién va a dar las peleas que hay que dar, o quién le miente y lo único que hace es llevarlos a un lugar del que quisieron salir».
En sintonía con la estrategia de campaña del presidente Mauricio Macri, Vidal les pidió a los bonaerenses que miren «lo que se hizo». «Les pido que nos acompañen por los hechos, porque se van a escuchar muchos discursos, sobre todo en esto tres días de actos de cierre; lo importante es lo que hacemos y los valores que hay detrás».
Sin embargo, reconoció que «la pobreza, la inflación, son problemas que no empezaron en el 2015, tampoco empezaron con el kirchnerismo», pero admitió que «no es volviendo para atrás como se se van a resolver, porque el futuro no es para atrás, nunca».