La concejal de Cambiemos, Milagros Fusari, no se guardó nada durante una entrevista en el programa “Ataque de Radio”, transmitido por FM 102.7 y el canal de YouTube radiopowerch. En el diálogo, abordó los vetos del intendente Javier Gastón y criticó duramente las políticas locales, dejando en claro su postura: “Para el oficialismo local, es más importante defender ideologías que beneficiar al vecino”.
Fusari fue aún más directa al referirse al estado de la salud pública en Chascomús: “No puede ser que Castelli, Dolores, e incluso Ranchos, siendo del mismo color político, estén mucho mejor. No puede ser que la gente de Chascomús tenga que atenderse en Ranchos, es como una ironía”, disparó.
«Falta conexión con el vecino»
Consultada por el conductor Alejandro Sosa sobre las causas que explican esta situación, la concejal no dudó: “Acá hay una desconexión total con escuchar al vecino. Simplemente eso, no hay voluntad, sobre todo hoy, que es muy fácil escuchar al vecino, por ejemplo, a través de las redes”.
Fusari insistió en que quienes integran su espacio político también son ciudadanos de Chascomús: “Vivimos acá, sufrimos la misma inseguridad y los mismos problemas que todos. No estamos ajenos a nada”.
Un episodio que marcó su confianza en el sistema de salud local
Durante la entrevista, Fusari recordó un inconveniente personal que vivió en el Hospital Municipal San Vicente de Paul, en agosto del año pasado, cuando estaba cursando su embarazo. “Necesité del hospital por una emergencia, y no pudo cubrir las necesidades que yo tenía… Terminé en La Plata, y a partir de eso, me atiendo ahí”, confesó.
Aunque no dio detalles específicos del problema, relató que su urgencia requería tranquilidad para confirmar que todo estaba bien con su embarazo, algo que el hospital no pudo garantizarle. “Aunque los trabajadores hagan lo imposible, el hospital tiene todos los problemas que a diario vemos en redes. Eso sucede porque no hay un criterio sólido para que el hospital funcione como tiene que funcionar”, agregó.
Fusari explicó que su emergencia ocurrió un domingo alrededor de las 19:30, y que en ese momento no había un médico idóneo ni la aparatología necesaria para realizar una ecografía urgente. Esa carencia la llevó a buscar atención en La Plata.
Sin embargo, concluyó con una nota positiva respecto a la institución local: “A pesar de lo que viví, si tuviera una urgencia, sigo confiando en el hospital, sobre todo por el trabajo del personal y los profesionales que ahí están. Ellos son los que sostienen el sistema”.
