Un exsocio del padre dijo que el Presidente padecía Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad. Y que tenía una «personalidad exorbitantes». Su padre recibió al menos 33 millones de dólares en subsidios. Hizo inversiones en Miami, pero el Presidente niega cualquier relación con esos fondos.
En la pre historia de Javier Milei hay situaciones que siguen llamando la atención, y que van siendo reveladas poco a poco. Una de ellas son los subsidios que recibió su padre Norberto durante los gobiernos kirchneristas y, la otra, el trastorno de orden psicológico para parecía de chico.
Eduardo Varcica, que fue socio de Norberto en el mundo de las empresas de transporte, contó que Milei, cuando era in niño, tenía un “carácter exorbitante” que lo hacía incontrolable para su propio padre.
“En ese momento no se conocía como ahora el TDAH”, explicó Varcica describir la personalidad de futuro presidente cuando era un niño. Se trata del Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad.
Según la Clínica Mayo, se trata de “un trastorno mental que comprende una combinación de problemas persistentes, como dificultad para prestar atención, hiperactividad y conducta impulsiva”.
La clínica añade que “el TDAH en los adultos puede llevar a relaciones inestables, mal desempeño en el trabajo o en la escuela, baja autoestima y otros problemas”, añade la Clínica en su web en castellano. Varcica no contó si el Presidente siguió padeciendo esa condición de adulto.
A su vez, dijo que cuando Norberto regresaba de trabajar todo el día en el colectivo no encontraba forma de contener a su hijo y por eso, lo único que podía hacer era “darle una paliza”.
No es la primera vez que se habla de la violencia que el padre de Milei ejercía con su hijo cuando era pequeño, el mismo Presidente contó que en una discusión con su padre con motivo de la guerra de Malvinas también hubo golpes.
Por otra parte, una investigación de EldiarioAR y el Diario La Nación junto con el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP) reveló los subsidios que enriquecieron a Norberto Milei cuando era presidente de las empresas de transporte Rocaraza SA y Teniente General Roca SA durante las presidencias Kirchner.
De acuerdo a esos trabajos, los subsidios ascendieron a, al menos, US$33 millones entre 2005 y mediados de 2007, y otros tantos a lo largo de sus años en el mundo empresarial. A diferencia de su hijo, Norberto Milei fue un defensor de la colaboración pública en sus actividades empresariales. Incluso llegó a reclamar más aportes estatales en documentos societarios de Teniente General Roca en 2003.
Antes, otra investigación de CLIP había revelado las inversiones inmobiliarias de Karina Milei, Norberto y Alicia Luján Lucich, la madre del Presdiente, a través de una empresa a su nombre, que incluyeron una causa judicial por incumplimientos y una condena a su padre.
Cuando se reveló esa información, el vocero presidencial, Manuel Adorni dijo que no había delito, que eran actividades privadas y que Milei estaba distanciado de sus padres cuando se realizaron. Pero otras fuentes indicaron que en el momento de la inversión de los 2.7 millones de dólares, el ahora presidente estaba reconciliándose con sus padres.
Mieli siempre dijo que gana dinero con, entre otras actividades, conferencias en el exterior que cobra en dólares. (DIB) AL