Murieron 122 personas y hubo 5.944 nuevos contagios de coronavirus en el país

Con las cifras de las últimas 24 horas el total de fallecidos desde el comienzo de la pandemia asciende a 51.122.

Otras 122 personas murieron y 5.944 resultaron contagiadas de coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, mientras los especialistas aseguran que el impacto del movimiento turístico durante la temporada de verano fue mucho menor de lo esperado, ya que el promedio de nuevos casos reportados a nivel nacional pasó de 11.530 diarios de mediados de enero a 5.493 esta semana.

En tanto, con las cifras oficiales informadas esta tarde el número total de fallecidos desde el inicio de la pandemia se elevó a 51.122, mientras los contagiados llegaron a 2.060.625, de los cuales 1.861.433 ya recibieron el alta y 148.070 son casos confirmados activos.

El Ministerio de Salud indicó que son 3.605 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 54,2% en el país y del 59,3% en la Área Metropolitana Buenos Aires.

Hoy se registraron en la provincia de Buenos Aires 2.510 casos; en la Ciudad de Buenos Aires, 596; en Catamarca, 52; en Chaco, 176; en Chubut, 56; en Corrientes, 125; en Córdoba, 591; en Entre Ríos, 116; en Formosa, 13; en Jujuy, 68; en La Pampa, 60; en La Rioja, 16; en Mendoza, 127; en Misiones, 100; en Neuquén, 162; en Río Negro, 79; en Salta, 146; en San Juan, 26; en San Luis, 264; en Santa Cruz, 106; en Santa Fe, 376; en Santiago del Estero, 54; Tierra del Fuego, 33 y en Tucumán 92.

Turismo

En este contexto, el impacto del turismo por la temporada de verano en los contagios de coronavirus fue mucho menor de lo esperado, ya que el promedio de nuevos casos reportados a nivel nacional pasó de 11.530 diarios de mediados de enero a 5.493 esta semana, con un descenso de 53%, lo que funcionarios y especialistas consideraron como una consecuencia de que «la gente comprendió que debía seguir cuidándose, aún de vacaciones».

«La situación estuvo controlada. Más allá de fotos que se vieron en alguna playa o balneario particular, en líneas generales la gente que vino de turista y los que vivimos acá entendimos que teníamos que seguir respetando los protocolos si queríamos transitar la temporada medianamente tranquilos», dijo hoy a Télam Viviana Bernabei, secretaría de Salud de General Pueyrredón.

Bernabei señaló que entre el 6 y el 8 de enero Mar del Plata superó los 300 nuevos casos por día por primera vez desde el 21 de octubre, día que marcó el máximo de notificaciones desde el inicio de la pandemia.

«Luego de eso se estabilizó en un número de contagios que para nosotros era aún alto -con 200 y 250 por día-, porque si se producía un brote íbamos a estar complicados. Pero ese brote no se produjo, la situación estuvo bajo control. Solo hubo dos días con algún alerta respecto de las internaciones en cuidados críticos, pero en ningún momento llegamos a estar complicados respecto de las internaciones», detalló la funcionaria.

Asimismo, sostuvo que tras la estabilización de casos, «comenzó a bajar la tasa de positividad», que en la primera semana de enero había sido de 45 por ciento, y durante el resto de la temporada osciló entre el 31 y el 35 por ciento.

En el mismo sentido, Eduardo D’Agostino, secretario de Salud de Pinamar, indicó que «la percepción actual es que salió todo bien», aunque aclaró que se tendrá una radiografía más fiel del impacto de la pandemia sobre el cierre de febrero o inicio de marzo.

D´Agostino señaló que en el partido disminuyó tanto el número de contagios como la positividad en las últimas semanas, en la que los casos activos pasaron de 432 en el arranque del mes a 278 tras los feriados por Carnaval, «pero la calidad del número depende del impacto o no en personas de riesgo».

La evolución de los positivos en Mar del Plata y Pinamar es una muestra de lo que pasó en la Costa Atlántica y también en casi todo el país, donde a nivel nacional los casos comenzaron a descender a razón de un 14 por ciento semanal desde que se alcanzó un promedio máximo de notificaciones diarias la semana del 14 de enero, con 11.530 pacientes con Covid.

América y el ciclo lectivo escolar

En el plano internacional, el inicio del ciclo lectivo en plena pandemia en algunos países de América revivió el debate sobre la modalidad de las clases y suscitó huelgas docentes contra la apertura de colegios, mientras que los casos de coronavirus siguen siendo altos y los Gobiernos ensayan estrategias para continuar con la campaña de vacunación a pesar de la escasez de aplicaciones.

La discusión que gira en torno a la presencialidad, virtualidad o formato mixto de las clases suma ahora un nuevo punto que se vincula a las prioridades establecidas en los planes de vacunación: los docentes piden ser reconocidos como trabajadores de primera línea, pero, hasta ahora, la respuesta de los Gobiernos no fue inclusiva.

Por ejemplo, en Estados Unidos, el país más afectado por la pandemia con casi 28 millones de casos y medio millón de muertes, el Gobierno de Joe Biden anunció que no será un requisito vacunar a los docentes para que las instituciones educativas vuelvan a abrir.

El miércoles pasado, en medio de una protesta nacional del sindicato docente, el principal experto en enfermedades infecciosas de EEUU, Anthony Fauci, consideró que las escuelas pueden abrirse de manera segura con el uso de equipos de protección y otras medidas de mitigación, como la integración de grupos de alumnos más pequeños.

El argumento fue compartido por los republicanos, que abogan por la reapertura de las escuelas, citando el éxito de los colegios católicos y otros privados al reanudar la enseñanza presencial hace meses, sin embargo, el coordinador de respuesta de Covid, Jeff Zients, expresó que «los maestros deben ser vacunados, como otros trabajadores de primera línea». (Fuente: Télam)