Así lo informa el reporte del Ministerio de Salud de la Nación. Suman 76.693 los fallecidos registrados oficialmente a nivel nacional y 3.702.422 los contagiados desde el inicio de la pandemia.
Otras 560 personas murieron y 39.207 fueron reportadas con coronavirus en las últimas 24 horas en la Argentina, mientras el Gobierno centra sus expectativas en la aceleración de la vacunación y en la gestión para la compra de grandes volúmenes de dosis que fortalezcan la campaña de inmunización.
Según las cifras oficiales informadas, el número total de fallecidos desde el inicio de la pandemia se elevó a 76.693, en tanto los infectados llegaron a 3.702.422, de los cuales 3.252.843 ya recibieron el alta y 372.886 son casos confirmados activos.
El Ministerio de Salud indicó que son 6.872 los internados en unidades de terapia intensiva, con un porcentaje de ocupación de camas de adultos de 77,1% en el país y del 76,6% en el Área Metropolitana Buenos Aires.
Este viernes se registraron en la provincia de Buenos Aires 15.035 casos; en la Ciudad de Buenos Aires, 3.026; en Catamarca, 422; en Chaco, 727; en Chubut, 440; en Corrientes, 491; en Córdoba, 4.654; en Entre Ríos, 1.476; en Formosa, 1.203; en Jujuy, 182; en La Pampa, 570; en La Rioja, 210; en Mendoza, 1.127; en Misiones, 214; en Neuquén, 987; en Río Negro, 600; en Salta, 636; en San Juan, 921; en San Luis, 638; en Santa Cruz, 220; en Santa Fe, 3.653; en Santiago del Estero, 633; Tierra del Fuego, 80 y en Tucumán, 1.062.
En este contexto, el Gobierno confía en que los nueve días de aislamiento estricto que rigen desde el sábado pasado alivien la «tensión» del sistema sanitario generada por la segunda ola de contagios de coronavirus, mientras centra sus expectativas en la aceleración de la vacunación y en la gestión para la compra de grandes volúmenes de dosis que fortalezcan la campaña de inmunización.
El presidente Alberto Fernández dijo en la noche del jueves que el aislamiento estricto que finaliza el domingo servirá para «ordenar el sistema sanitario» y manifestó su anhelo de que las limitaciones a la circulación por nueve días tengan como correlato una disminución de los contagios.
«Sobre estos nueve días que están transcurriendo de este encierro un poco más fuerte, vamos a ver los resultados en unos días, pero definitivamente creo que van a a bajar los casos y vamos a poder ordenar el sistema sanitario», dijo Fernández, en una entrevista desde Olivos.
La preocupación de las autoridades nacionales pasa también por la falta de recursos humanos en el área de la salud y así fue expresado por el jefe de Estado: «Podemos seguir poniendo camas de terapia intensiva, pero no tenemos más médicos que las atiendan. Debemos parar los contagios para que puedan atender, no para que tengan camas».
La Argentina, en tanto, superará el lunes los 17,5 millones de vacunas recibidas desde el inicio de la pandemia, cuando arriben más de dos millones de dosis de AstraZeneca, en la mayor partida que llegue en un solo vuelo, y que reforzará el plan de vacunación dispuesto por el Gobierno nacional en el marco de la segunda ola de la enfermedad.
Esta partida se sumará a los acuerdos alcanzados -pero que aún faltan terminar de formalizar- con la empresa china Sinopharm para la provisión de 6 millones de vacunas entre junio y julio, y con el laboratorio de origen chino Cansino Bio para contar con más dosis para inmunizar a la población.
Por su parte, el biólogo molecular y biotecnólogo argentino Ernesto Resnik remarcó que «más allá de la situación actual en cuanto a los casos y la circulación del virus» cree que «estamos empezando a ver el final gracias al proceso de vacunación».
«Si tengo que arriesgar, calculo que para septiembre u octubre va haber bastante alivio de la situación, así que mi conclusión es que el proceso de vacunación está muy bien encaminado», manifestó a Télam Radio el científico que reside en Minnesota, Estados Unidos, y trabaja en el desarrollo de anticuerpos monoclonales en una empresa biotecnológica internacional.
«Ya se está alcanzando lo que yo creía era la primera meta indispensable que eran, unas 15 millones de dosis y el alivio de vacunar a la mayor parte de las personas en riesgo, los mayores de edad, eso está llegando, se va a cumplir y es un gran alivio», insistió Resnik.
En el plano internacional, los más de 40 países, incluyendo a Argentina, que impulsan en la Organización Mundial de la Salud (OMS) un mecanismo de licencias voluntarias para compartir conocimientos y tecnología contra el coronavirus, relanzaron la iniciativa al afirmar que «garantizar el acceso a las vacunas es esencial para terminar con la pandemia».
Este sábado se cumple un año del nacimiento del Acceso Mancomunado a la Tecnología (conocido como C-TAP), un instrumento pensado principalmente para que los laboratorios compartan voluntariamente la propiedad intelectual y otros datos de los fármacos para diagnosticar y tratar la Covid-19.
El instrumento tuvo un gran impulso por parte de Costa Rica, es copatrocinado por más de 40 países, entre ellos Argentina, y si bien más naciones se sumaron en este lapso como el caso de España, todavía es rechazado por los grandes laboratorios que producen las vacunas que se administran masivamente a nivel mundial.
«Estamos dejando la puerta abierta para que las empresas farmacéuticas que son muy conocidas puedan entrar ya que muy pocos hogares se beneficiaron de las herramientas que elaboraron», apuntó hoy el director general de la OMS, Tedros Adhanom.