Se trata de Lourdes Arrieta. Como Rocío Belén Bonacci dijo que fue “engañada”.
La semana pasada fue Rocío Belén Bonacci quien dijo haber sido llevada “engañada” a la visita que un grupo de diputados de La Libertad Avanza hicieron a varios represores detenidos en el penal de Ezeiza por delitos de lesa humanidad. Ahora fue Lourdes Arrieta quien además de utilizar el mismo argumento que su compañera de bloque agregó no sabía quién era Alfredo Astiz ni lo otros condenados.
“Estuve y hablé con Astiz. Yo no viví en esa época, nací en 1993 y no tengo ni idea de quiénes eran los personajes de esa época, la verdad es que vi internos de 80 años y yo no sabía los nombres, las caras y no tenía ni idea”, dijo este miércoles en diálogo con MDZ Radio.
La visita al penal de de Ezeiza fue organizada por el diputado Beltrán Benedit. Se trató de un viaje oficial ya que el grupo de diputados se trasladaron con una camioneta de la Cámara baja.
Estuve y hablé con Astiz. Yo no viví en esa época, nací en 1993 y no tengo ni idea de quiénes eran los personajes de esa época, la verdad es que vi internos de 80 años y yo no sabía los nombres, las caras y no tenía ni idea
“Fue una reunión que fuimos engañados un grupo de diputados. No puedo decir si todos lo sabían o no, pero en el caso de la diputada Bonacci y como yo, empezamos a hablar de este tema porque en un momento teníamos angustia y entramos en un estado de shock. Y en este tiempo me envalentoné y decidí salir a contar lo que fue”, fue la explicación que dio Arrieta sobre la visita.
Arrieta, de 31 años, es otra fan del animé y se hizo conocida tanto por llevar al patito kwaii en la cabeza durante las sesiones como por haber presentado avales de personas fallecidas para armar La Libertad Avanza en Mendoza.
Como Bonacci, señaló que nunca supo “que era a la Unidad 31, ni tampoco a ver justamente a los represores. A los cuales repudio completamente y a todo acto de violencia, sobre todo a los delitos de lesa humanidad”.
Además, agregó que “es un tema que no está en mi agenda que nunca lo estuvo, que no está en mi itinerario de actividades ni siquiera de proyectos. Hubo un juez que dictaminó que tienen que estar ahí y punto. Lo demás se tendrá que ver y hablar con los demás diputados”.
En la comitiva a Ezeiza estuvieron además de Benedit Bonacci y Arrieta, los diputados Alida Ferreyra, María Fernanda Araujo y Guillermo Montenegro. No solo vieron a Astiz, sino que también se encontraron con los represores Raúl Guglielminetti (exagente de inteligencia del Batallón 601), Carlos Guillermo Suárez Mason Jr. (ex marino responsable de delitos de lesa humanidad en la ESMA), Antonio Pernías (miembro del grupo de tareas 3.3.2 en la por entonces ESMA), Gerardo Arráez (integrante del circuito represivo en Club Atlético, Banco y Olimpo), Honorio Carlos Martínez Ruíz (ex agente de la SIDE), Juan Agustín Oyarzábal Navarro (ex oficial de la policía de Mendoza), Juan Manuel Cordero (represor uruguayo), Mario “el Cura” Marcote (de la Patota de Feced en el Servicio de Informaciones, en Dorrego y San Lorenzo, en Santa Fe), Miguel Angel Britos (expolicía) y Adolfo Donda (exoficial de la Armada y secuestrador de su sobrina, la exdiputada Victoria Donda). La semana pasada, en una entrevista televisiva al programa Jaque Mate que se emite por un canal de Santa Fe, Bonacci dio argumentos similares a los de Arrieta: “No quiero decir que el diputado me traicionó o que su objetivo era engañar. Yo digo que sentí un engaño desde el momento en que a mí no se me proporcionó la información completa del objetivo real de la visita. Yo hablé tres veces por teléfono con mi compañero de bloque, le consulté cuál era el objetivo final de esa visita y no entró más en detalles que decir que era una visita humanitaria, que iba a ser muy importante, que iba a ser muy lindo, que teníamos que participar (…) realmente, en el fondo, sentí que fue un engaño porque la información se me proporcionó llegando al penal”. (DIB)