Reclamos en todo el mundo
Las demandas que se generan en todo el planeta son por varios millones de dólares, lo que obliga a la multinacional alemana a impulsar una también millonaria inversión en investigaciones que deriven en una solución de fondo a este problema.
Desde que adquirió el gigante de las semillas y los agroquímicos Monsanto, la compañía alemana Bayer no ha dejado de acumular dolores de cabeza de la mano de las críticas, las revelaciones y los jucicios por los efectos del uso de su herbicida estrella, el Roundup, a base de glifosato. Por eso, da la impresión de que ayer, desde su casa central en Leverkusen, han decidido afrontar los cuestionamientos y se anunció una serie de medidas para intentar aplcacar la situación de cara al futuro.
Si bien aseguró que el glifosato “seguirá teniendo un rol importante en la agricultura mundial”, la compañía anunció que invertirá unos US$ 5.600 millones para desarrollar otras aplicaciones alternativas para combatir malezas.
“Estas inversiones en investigación y desarrollo tienen como objetivo mejorar el conocimiento de los mecanismos de resistencia y descubrir y desarrollar nuevas formas de acción”, según Bayer.
Otros detalles
A través de un comunicado de prensa, la multinacional acusó recibo del impacto que han tenido las sentencias en Estados Unidos contra Monsanto, acusada de no advertir claramente los riesgos asociados a la aplicación del Roundup en personas que finalmente contrajeron cáncer.
Se estima que hay cientos de demandas más que esperan su turno en el país del Norte.
“La transparencia es el pilar fundamental de Bayer”, afirmó la empresa, que también se ocupó de defender el glifosato, incluido por la Organización Mundial de la Salud en la lista de sustancias potencialmente cancerígenas.
La compañía recordó que está difundiendo “cientos de estudios para casi treinta compuestos, entre ellos los 107 estudios del glifosato”.
Además, Bayer anticipó que “invitará a científicos, periodistas y representantes de ONGs a participar en su preparación científica para el próximo proceso de renovación del registro del glifosato en la Unión Europea, que comenzará más adelante este año”.