Lo resolverá el Consejo Federal de Educación. Después deberá plasmarse en una resolución ministerial. En lo sustancial, permite pasar de año adeudando más materias.
El gobierno de la provincia de Buenos Aires definirá mañana si flexibiliza o no las normas vigentes para pasar de año en los colegios secundarios. Lo hará a través de un organismo colegiado, el Consejo General de Educación, cuya definición deberá ser después refrendada por el ministro.
Tal como informó DIB, esta reforma está elaborada y siendo analizada desde mediados del año pasado. Mañana llega la primera instancia de definición clave, la del Consejo, un organismo compuesto por ocho profesores que emitirá una definición. Si fuera positiva, esa decisión deberá luego ser refrendada por una resolución firmada por el ministro Alberto Sileoni.
Vale aclarar que de los ocho integrantes del Consejo, tres representan al Frente de Todos, tres a Juntos por el Cambio y dos son representantes gremiales. Según información a la que accedió esta agencia, existiría allí una opinión mayoritaria favorable a la reforma aunque ese dato no fue oficialmente confirmado.
En lo sustancial, lo que plantea la reforma es que se podrá pasar de año adeudando más materias. Además, numéricas convivirán con El Registro Institucional de Trayectorias Educativas (RITE), que al fin y al cabo es lo que determinará si una materia está “aprobada” o no en cada bimestre. Tiene tres escalas:
-Trayectoria Educativa Avanzada (TEA): son los estudiantes que alcanzaron los aprendizajes correspondientes en una materia.
-Trayectoria Educativa en Proceso (TEP): son los estudiantes que no alcanzaron los aprendizajes correspondientes, pero que mantienen una buena vinculación pedagógica.
-Trayectoria Educativa Discontinua (TED): son los estudiantes que no alcanzaron los aprendizajes ni estuvieron vinculados a la escuela.
El sistema educativo bonaerense es por amplio margen el más grande del país. Solo en secundaria funcionan 4 mil escuelas y estudian 1.4 millones de chicos. Cada año, según las cifras oficiales, repiten 140 mil estudiantes. En esa estadística el gobierno bonaerense ve una necesidad de reforma.
En lugar de las trece materias tradicionales que tiene la secundaria, desde este año pasarán a englobarse en 8 o 9 agrupamientos verticales, es decir, que atravesarán los seis años que dura el nivel. Por ejemplo, un agrupamiento es Ciencias Sociales y allí ingresan Historia y Geografía. Otro agrupamiento es Ciencias Naturales y allí entran Biología, Física y Química.
Los estudiantes pueden arrastrar agrupamientos -por ejemplo Matemática- pendientes de aprobación durante incluso los primeros tres años de secundaria. De acuerdo al sinfín de escenarios posibles que describe el documento, recién en cuarto debería intensificar Matemática de primero y segundo, y sí recursar matemática de tercero. Es decir, dentro de cada agrupamiento, se puede tener desaprobadas hasta 2 materias. Con la tercera materia pendiente, se establece el recursado obligatorio pero solo de esa asignatura del año anterior.
El documento nunca menciona la palabra “repitencia” ni “repetir”, pero sí alude al “recursado del año completo” solo en un caso extremo: para aquellos estudiantes que tengan trayectoria en proceso o discontinua en todas sus materias después de pasar por un período de intensificación de saberes durante febrero o marzo.
Entre los especialistas hay cierto consenso en que la repitencia no redunda en mejores aprendizajes y que incluso contribuye a que los chicos abandonen la escuela.
La resolución que el Consejo General tratará mañana crea un “Equipo de Acompañamiento de las Trayectorias Educativas”. Ese equipo estará conformado por los directivos de la escuela, integrantes del área de orientación, un preceptor cada seis secciones (cursos), un profesor cada seis secciones y los docentes “coordinadores de trayectorias” que la institución tenga designados. Habrá un equipo por turno que buscará atender los casos de los alumnos más comprometidos.
El equipo estará a cargo de tomar decisiones sobre la continuidad de las trayectorias de los estudiantes que adeudan más materias. Entre sus funciones, estará brindar acompañamiento de forma personalizada, diseñar alternativas de refuerzo de aprendizajes, establecer métodos para ampliar el horario escolar ya sea en la misma asignatura que se encuentra cursando, a contraturno o con clases los sábados. (DIB)