Vicente López: según la imputación, Del Rio estafó a sus padres con un departamento y por eso los mató

El parricidio, de acuerdo a lo que desarrolló la fiscalía, fue planeado porque el acusado no podía sostener la mentira de una operación inmobiliaria que le habían encargado.

Los fiscales que investigan el doble crimen del matrimonio de Vicente López acusaron a su hijo Martín Santiago Del Río de haber ideado “un plan” para concretar el presunto parricidio porque no podía sostener la mentira de la operación inmobiliaria de la compra de un departamento en Núñez con la que los estafó y que no podía concretar para su mudanza. En tanto, la Policía encontró en un allanamiento en el departamento que alquilaba el imputado un buzo igual al que usaba un hombre que aparece en las imágenes de una cámara de seguridad, filmado el día del sangriento hecho.

El plan se desprende de la imputación completa que los fiscales de Vicente López Martín Gómez, Alejandro Musso y Marcela Semería redactaron en el pedido de conversión de la aprehensión en detención, que le presentaron en las últimas horas el juez de Garantías 1 de San Isidro, Ricardo Costa.

“El día 24 de agosto de 2022 entre las 17.33 y las 18.30 aproximadamente, el aquí encartado, Martín Santiago Del Rio, se hizo presente a pie en el domicilio de sus progenitores, emplazado en la arteria Melo 1.101, de la localidad y partido de Vicente López, provincia de Buenos Aires, y en base al plan que previamente había diagramado, ingresó a la vivienda por sus propios medios a través del garaje”, comienza la imputación.

“Una vez dentro, decidió en base al plan estipulado, quitarles la vida, de manera clara e inequívoca. Así, aprovechando la relación cordial propia del vínculo familiar, mediante engaño, los hizo descender hacia el sector del garaje y abordar su vehículo particular, marca Mercedes Benz modelo E350 color gris dominio JPP-012”, continúa el texto de la descripción del hecho.

Y agrega: “Una vez en ese sector del inmueble, María Mercedes Alonso se ubicó en el asiento del conductor y Enrique del Rio en el del acompañante, mientras que el encartado se situó en el asiento trasero”.

Ataque

Según los fiscales, en ese momento, “actuando sobre seguro, dada la confianza depositada en él por sus progenitores, quienes se trataban de dos personas de avanzada edad y en el caso de su padre, con problemas de movilidad reducida, se valió de toda la situación, es decir la falta de precaución y escasa posibilidad de actos de defensa, por lo que arremetió a su padre por la espalda, efectuándole tres disparos con una pistola calibre 9 mm, los cuales impactaron en la zona cervical derecha, intercostal izquierda y en el muslo izquierdo”.

“Concomitantemente con ello, le efectuó un disparo a su madre a una distancia de menos de cincuenta centímetros de la cabeza, cuyo proyectil ingresó por la zona superior a la ceja derecha generando la pérdida del globo ocular derecho, todo lo cual provocó la muerte inmediata de sus progenitores”, describen.

“Mendacidad”

Al abordar la posible motivación, los fiscales afirman que “la decisión de segar la vida de aquéllos tuvo su móvil en la circunstancia de no poder prolongar la mendacidad en torno a la operación inmobiliaria referente a la Unidad N° 31 B, del edificio Chateau ubicado en Avenida Del Libertador 7.050 de CABA y de poner al desnudo la imposibilidad de que sus progenitores se mudaran a dicho inmueble, tal como se lo habían encomendado a partir del poder amplio general y de disposición que le habían conferido para ocuparse de ese tipo de transacciones”.

“A su vez -finaliza la imputación-, los recaudos adoptados por el encartado a la hora de hacerse del DVR del sistema operativo de las cámaras de seguridad privadas existente en el inmueble, montar una escena de aparente compatibilidad con un evento de sustracción, consistente en generar un contexto de desorden y la posible sustracción de elementos de valor pecuniarios, tales como: la suma de alrededor de 10.000 dólares estadounidenses, 1.500.000 pesos, 50 lingotes de oro de 10 gramos y varios diamantes; y el esfuerzo por ocultar su rostro, sumado a la gran cantidad de disparos efectuados, dan cuenta del ultra fin por parte de aquél, que no sería otro que procurar su impunidad”.

Por todo ello, Gómez, Musso y Semería le solicitaron al juez que Del Río hijo (47) continúe preso bajo la imputación de un “doble homicidio calificado por la alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser críminis causae” (matar para lograr la impunidad), delito que tiene como única pena la prisión perpetua.

El buzo

Mientras tanto, los investigadores secuestraron un buzo con capucha azul que, según están convencidos, es el que vestía Del Río cuando, de acuerdo a la fiscalía, quedó filmado llegando y saliendo de la casa donde hace dos semanas presuntamente asesinó a sus padres.

Se trata de un buzo tipo campera, con cierre al medio y capucha que fue secuestrado anoche en el mismo allanamiento a un departamento que alquilaba el imputado en el barrio porteño de Belgrano, donde también se secuestró una pistola Glock del mismo calibre 9 milímetros que el empleado en el doble asesinato y credenciales de otra arma 9 milímetros, pero marca Bersa, que aún no fue encontrada.

“Es el mismo buzo con el que lo tenemos filmado caminando más de 30 cuadras ida y vuelta desde Núñez a Vicente López el día del hecho. Siempre con la capucha de ese buzo azul colocada y tapándose además con barbijo y con una gorra con visera que tenía por debajo de la capucha de ese buzo”, dijo uno de los investigadores. (DIB)