Cientos de personas se acercaron a pesar de la lluvia para acompañar a Graciela y Silvano, los padres del joven asesinado por un grupo de rugbiers, que serán juzgados en 2023.
Cientos de personas se concentraron a las 19 en la localidad de Villa Gesell, bajo la lluvia, en una tarde destemplada, para participar del homenaje y evento religioso para recordar a Fernando Báez Sosa, asesinado golpes a la salida del boliche Le Brique hace exactamente dos años.
Los padres del joven, Silvino y Graciela, llegaron puntuales junto a su abogado Fernando Burlando. Ambos llevaron remeras con la foto de su hijo. Los presentes los aplaudieron largamente cuando arribaron y en varias oportunidades, mientras tomaron la palabra distintos oradores cercanos a la familia.
El conductor del evento destacó lo “buena persona que fue el joven que encontró la muerte en el lugar” y se pidió “justicia y basta de violencia”.
“Fernando era un chico excelente, le gustaba venir a ver el mar a pasarla lindo con sus amigos, lamentablemente se le cruzaron un par de asesinos por el camino, no puedo creer que ocho chicos de la misma edad, asesinos, estuvieran aquí, decidieron quitarle la vida a nuestro hijo, el único que teníamos, pido que nos sigan acompañando en este pedido de Justicia”, dijo Silvano, al tomar la palabra.
“Para mí es como si fuera ayer que recibimos la peor noticia de nuestra vida”, dijo Graciela conmovida, al tiempo que relató la forma en que se enteró que habían matado a su hijo. “Nunca tuvo enemigos, era amor cariño, solidario, honesto, y de ayudar a la gente, no sabía lo que era odiar y nunca discriminó a nadie”, añadió. “La forma en que me arrebataron a nuestro hijo es imperdonable, que esto no quede en la nada”, suplicó la mujer, y añadió: “Todos los chicos deben ir a divertirse y volver a su casa sanos y salvos donde están esperando sus padres, quiero Justicia por mi hijo, que esto no quede en la nada”.
“Muchas veces me pregunto por qué, no encuentro la palabra de los que nos ha pasado, tenemos una tristeza enorme y no tenemos marcha atrás, tal vez alguna vez encuentre un poquito de paz, un poquito de calma el día que vea enjuiciados a los asesinos de mi hijo”, sostuvo la mujer, quien al terminar su alocución se descompensó y debió ser asistida.
Minutos después de iniciado el acto, se realizó una oración interreligiosa haciendo alusión a la paz. Participaron líderes católicos, de la iglesia anglicana, de la religión judía, de la Iglesia de Jesucristo de los últimos días y de la comunidad musulmana en argentina.
Los únicos pedidos a viva voz de los presentes que acompañaron el evento fueron los de “justicia” y “perpetua” para los rugbiers detenidos, a quienes también se les gritó “asesinos”, en un clima de conmoción y profunda tristeza.
Estar en el lugar
Los padres de Fernando Báez Sosa visitaron hoy por primera vez el lugar del crimen, donde rezaron una oración en su memoria en el horario en el que hace dos años mataron a su hijo.
“Me arrodillé, prendí una vela y le recé un rosario”, contó Graciela Sosa, quien junto a su esposo, Silvino Báez, concurrió hoy a las 5.45, a la puerta del local bailable Le Brique, donde Fernando fue atacado por un grupo de rugbiers la madrugada del 18 de enero de 2020.
La mujer aseguró que fue la primera vez que pisó el lugar donde mataron a su hijo y que solo pudo estar “unos minutos”, ya que comenzó a “temblar” y debió regresar a la casa donde se hospeda.
En el lugar donde cayó Fernando producto de los golpes y patadas recibidas en el cuerpo y la cabeza, en plena avenida 3 de Villa Gesell, se formó un improvisado altar junto a un árbol, donde las personas dejaron rosarios, flores, velas e imágenes del joven con leyendas de pedido de Justicia.
“Siento el amor y el apoyo de la gente, es algo impresionante. No sé cómo agradecer todo el cariño hacia Fernando”, contó Graciela.
Silvino manifestó que extraña “demasiado” a Fernando porque el joven “era todo” para ellos, y que “con la fuerza” que le brindan sus amigos están “tratando de seguir adelante”.
“Venir los dos acá es levantar un poco de fuerza y estar fortalecidos para que cuando llegue el juicio estemos de pie. No es nada fácil, cada día que pasa es peor”, dijo.
Por el crimen del joven se encuentran detenidos en la alidía de Melchor Romero Máximo Thomsen (22), Ciro Pertossi (21), Luciano Pertossi (20), Lucas Pertossi (22), Enzo Comelli (21), Matías Benicelli (22), Blas Cinalli (20) y Ayrton Viollaz (22), quienes serán juzgados a partir del 2 de enero de 2023 en los tribunales de Dolores. (DIB) ACR