La pseudo rotonda de Escribano y Avenida Costanera tiene, como ya lo hemos dicho, problemas en su funcionamiento dado que su diseño permite la circulación de dos de los carriles que ingresan a alta velocidad, un tercero más moderado y un cuarto realmente limitado en velocidad.
Es decir que concretamente, lejos está lo construido de ser una rotonda, donde todas las velocidades bajan y se emparejan para dar seguridad vial.
Pero a todo esto se debe agregar otro preocupante inconveniente, y es que pese a la nueva construcción se han mantenido los cuatro contenedores para residuos reciclables ubicados sobre la mano sur de Escribano, que entorpecen directamente la circulación y se han transformado en obstáculos peligrosos, al estacionar los vehículos a su lado, a la salida de la pseudo rotonda, para dejar los contenidos.