Bajo la consigna «ollazo nacional contra el hambre», organizaciones sociales protestan «en rechazo al ajuste, la pobreza y el crecimiento del desempleo y la miseria en el país».
Integrantes de distintas organizaciones sociales realizaban este mediodía una protesta en el Obelisco, en el centro porteño, convocada bajo la consigna «ollazo nacional contra el hambre».
Entre las organizaciones que participan de la movilización, que afecta el tránsito vehicular en la zona, se encuentran el Polo Obrero, MTR Votamos Luchar, Bloque Piquetero Nacional, Organización 17 de noviembre, Barrios de Pie, MST Teresa Vive, Izquierda Latinoamericana, entre otras.
En ese marco, las organizaciones iniciaron a las 11 una olla popular con alimentos de la canasta que se entrega a los comedores comunitarios.
Según se indicó en un comunicado, la protesta es «en rechazo al ajuste, la pobreza y el crecimiento del desempleo y la miseria en el país».
«Reclamamos un bono de emergencia para los beneficiarios de planes sociales»
EDUARDO BELLIBONI
«El ollazo nacional se convocó luego de que se relevaran los datos oficiales de pobreza e indigencia del Indec, que consignaron que un 40,6% de la población es pobre y un 10;7% son indigentes, en función de datos del último semestre», según se indicó en un comunicado difundido por las agrupaciones que llaman a esta protesta.
El referente del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, informó a Télam que se trata de «una jornada de agitación y de denuncia» como consecuencia de «la situación en los comedores que se agrava».
«Vamos a cocinar con esa comida para que respondan los funcionarios a cargo si eso se puede comer todos los días, como pretenden los que envían estos alimentos a los comedores», remarcó el dirigente.
Por otro lado, los manifestantes reclaman que los montos de los programas sociales sean aumentados ya que «son muy exiguos» y «han sido arrasados por la inflación».
«Reclamamos un bono de emergencia para los beneficiarios de planes sociales», declaró Belliboni.
En tanto, anunció que la semana que viene «comenzará un plan de lucha con cortes de ruta progresivos en las distintas ciudades de todo el país, en 21 provincias», y dijo que no descartan «medidas de fondo, como son los acampes en las dependencias del Estado».
