El organismo se refirió al canje de bonos de la Anses y otros organismos oficiales. Pide además políticas «consistentes y restrictas».
El Fondo Monetario Internacional está al tanto del canje de bonos de la Anses y otros organismos oficiales anunciado por Economía y advirtió este jueves que hay que realizarlo “de manera que no agregue vulnerabilidades en el futuro”, mientras que resaltó que cualquier medida debe estar acompañada por políticas macroeconómicas “consistentes y restrictas”.
En su primera conferencia al frente de la Secretaría de Comunicaciones del organismo, en reemplazo del retirado Gerry Rice, Julie Kozack respondió preguntas de periodistas de todo el mundo. Kozack es una conocedora del caso argentino porque siguió de cerca las negociaciones del programa desde su puesto de subsecretaria para el Hemisferio Occidental del organismo.
La funcionaria fue consultada sobre las recientes medidas tomadas por Economía, que obliga a los entes públicos, como la Anses, a cambiar sus bonos en dólares por títulos en pesos, una medida destinada a reducir la brecha entre el dólar blue y los financieros y a consolidar las reservas. Esta decisión fue muy criticada por la oposición, que estimó que se “juegan los fondos de los jubilados”.
Al respecto Kozack dijo que “en lo que se refiere a la decisión reciente del Gobierno sobre la deuda estamos al tanto de esa decisión, estamos evaluándola de acuerdo a los objetivos del programa. Desde nuestro punto de vista, una gestión prudente de la deuda es necesaria para poder mejorar el funcionamiento del mercado de bonos doméstico y el cambiario”.
Sin embargo, lanzó una advertencia: “Pero (la gestión) hay que realizarla de una manera que no conduzca a vulnerabilidades en el futuro y también debe ir acompañado de políticas macroeconómicas consistentes y restrictas”.
El 13 de marzo el staff del Fondo y las autoridades argentinas aprobaron la cuarta revisión del programa de Facilidades Extendidas, que flexibilizó el objetivo de reservas que se vio muy golpeado por la sequía y otras variables económicas. No se dijo oficialmente cuánto se relajaría la meta de reservas, pero se estima que sería un alivio de alrededor de US$2.000 millones para 2023.
El directorio ejecutivo está ahora analizando ahora el caso para que, una vez dada la luz verde, puedan desembolsarse los US$5.300 millones para reservas. Kozack no dio precisiones sobre la fecha en la que el board se reuniría para tratar el tema.
“La reunión de directorio ejecutivo se celebrará muy pronto y normalmente hay un período de tiempo entre cuando llegamos a un acuerdo con el personal técnico y se llega a presentarlo al directorio. Se prevé que esa reunión se celebrará relativamente pronto y en conformidad con el ciclo trimestral normal de revisiones”, dijo Kozack.
Desde Economía dejaron trascender que la reunión sería el 31 de marzo y que los pagos previsto en esta semana se postergaron hasta que el board libere el dinero.
La funcionaria volvió a resaltar las advertencias al Gobierno que se habían expresado en el comunicado del Fondo cuando se aprobó el acuerdo técnico, cuando se analizó la meta de reservas.
“Ante un contexto macroeconómico diferente, sobre todo por la sequía reciente, se requieren ahora acciones de políticas más fuertes para salvaguardar la estabilidad. Estas acciones más fuertes también se requieren para enfrentar la inflación reciente y las reveses en las políticas y mantener el anclaje del programa”, dijo Kozack.(DIB)