La legisladora chascomunense es autora del proyecto que declara interés provincial sobre la ludopatía en Buenos Aires se refirió en declaraciones periodísticas a los principales conceptos de la norma.
Desde que la coalición Cambiemos asumió como oficialismo en la provincia de Buenos Aires, al menos en cuanto al juego, María Eugenia Vidal dio continuidad a las políticas sobre las que el “macrismo” había avanzado en territorio porteño.
– Mayor control sobre una industria en constante expansión, muchas veces vinculada a negocios turbios.
– Limitar la apertura de nuevos casinos, bingos y casas de apuestas, respetando a quienes poseen licitaciones vigentes.
También se suma para 2019 una propuesta que según afirman los asesores del gabinete económico de la gobernadora, podría dejar 2200 millones de pesos en las arcas provinciales:
Obligar a los sitios de apuestas online a registrarse y tributar a través de impuestos (canon + ingresos brutos).
En este contexto, la legisladora provincial Liliana Denot, una de las gestoras del proyecto para profundizar el tratamiento de la ludopatía en Buenos Aires, fue consultada por Radio 2 de Jujuy el alcance de la iniciativa propuesta desde su espacio y que ya posee media sanción.
“En nuestro caso hay una decisión política. Había un desfase entre la gran cantidad de casinos y la población. En los casinos hay una modalidad de juego compulsiva especialmente con las tragamonedas y jugadas online que afecta a personas de cualquier edad y sector social”.
No obstante la diputada reconoce que “todo lo preexistente no se puede modificar”, aunque si valora la incorporación de políticas de salud, concientización, relevamiento estadístico y el mecanismo de autoexclusión (el ludópata se inscribe en un padrón que le impide el acceso a las casas de juego).
Consultada por la particular situación que se ha generado en torno a uno de los principales atractivos turísticos de Jujuy, Denot quien es conocedora de las bondades de los paisajes de la provincia del norte, invitó a la autorreflexión.
“Jujuy por si misma ofrece un atractivo especial que atrae a la gente. Es un debate que se deben dar en función de qué tipo de turismo quieren para la zona, qué quieren promocionar. El juego no es malo, puede ser una distracción, pero hay personas que tienen una conducta adictiva, esto está planteado como una enfermedad por la OMS. Es absolutamente real que las personas vulnerables ven en esta posibilidad de cambiar su vida a través del juego. Como estado tenemos que estar muy atentos para tratar la ludopatía y para prevenir que el juego impacte negativamente en la sociedad”. (Fuente Jujuy al Momento)
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