Si bien en los últimos años las diferentes manifestaciones populares han conseguido poner aspectos de la mujer en igualdad con los del hombre, todavía falta erradicar culturalmente algunos temas que parecieran estar aún insertados, sobre todo, en las relaciones de pareja. Según una encuesta que se realizó sobre mujeres de distintas clases sociales, el 24% que no usa anticonceptivos, lo hace por imposición del hombre.
En diálogo con Matías Sáez y Albino Aguirre en “Todo No Se Puede”, Gimena De León, investigadora asociada del programa de protección social de CIPPEC, explicó que “lo llamativo ante este número es cómo contestan los varones. El 7% dice no usar métodos anticonceptivos. Ahí claramente hay una relación de poder de los hombres por sobre las mujeres. Lo cual nos tiene que hacer pensar en qué políticas tenemos que implementar para ir derribando estos estereotipos de género”.
Sin embargo, la investigadora reconoció que el número “varía de acuerdo a los distintos estatus sociales. Hay diferente acceso a la educación y una de las claves es avanzar con la educación sexual integral que no es sólo como prevenir embarazos”. En este sentido, dijo que “si no se deben abordar aspectos de derecho y de género en las que hacer pensar a las jóvenes cuál es la relación que tienen de noviazgo, si es más o menos violenta, etcétera”.
En un análisis general, De León destacó: “El mayor empoderamiento de las mujeres tiene que ver también con acceder a otros ámbitos de la sociedad. Uno de ellos, donde se manifiesta una mejoría en la situación de las mujeres, es en los cargos públicos. En términos de mejoras yo veo una evolución. Ahora todavía nos falta mucho, todavía no tenemos paridad en los cargos, en la inserción, las mujeres siguen ganando un 30% menos que los hombres y un montón de otras cuestiones donde se ve que la paridad no llegó”.
Pero volviendo al tema, la especialista explicó que si bien “se ha mejorado el uso de métodos anticonceptivos, se ha dejado de utilizar el preservativo, eso se ve como una involución. Hay que fomentar que las mujeres puedan tomar decisiones sobre su vida sexual”.
Por último, aclaró que “el tema de empoderar a las mujeres para que sean autónomas y puedan manifestar esas situaciones es muy importante. No sólo que no se cuidan ellos -los varones- porque no quieren, sino que tampoco dejan que se cuiden las mujeres. Tiene que ver con un contexto cultural. Falla la posibilidad de ejercer el empoderamiento”.
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