El uso adecuado de los contenedores de residuos garantiza la higiene de los espacios públicos

La contenerización contribuye a mejorar la higiene y el cuidado ambiental, agilizando el proceso de recolección.
Los contenedores, colocados en esquinas y lugares estratégicos de cada barrio, agilizan el retiro de los residuos orgánicos que se generan a diario en los domicilios.
Por lo tanto, escombros, ramas de podas, bolsas con pasto, electrodomésticos, neumáticos, residuos de obras, entre otros, no deben depositarse en ellos porque no están destinados a esta clase de residuos.
Por lo que no deben arrojarse en su interior elementos sueltos y de gran volumen. Tampoco deben depositarse restos de cenizas por el considerable riesgo que se provoque un incendio al entrar en contacto con los demás residuos.
Los papeles, cartones, plásticos, vidrios y latas limpias y secas se deben depositar en las campanas verdes o azules de los Puntos Limpios para una recolección diferenciada que favorece el reciclado de residuos y además, los Puntos Limpios Móviles con su recorrido itinerante favorece el reciclado de hasta diez fracciones diferentes de residuos reciclables como cartón y papel, plásticos, vidrios, latas metálicas, envases tetrabrik, textiles (ropas y calzados), telgopor; aceite vegetal usado, botellas de amor; residuos de aparatos eléctricos y electrónicos como computadoras, microondas, equipos de música, entre otros.