Analiza recursos y necesidades. Esas áreas son las dos preocupaciones principales en la pandemia
Kicillof, con intendentes, en una reuniòn anterior.
El gobernador Axel Kicillof ajusta con intendentes los planes post pandemia en dos áreas en las que considera que se concentrarán los mayores desafíos para el Estado una vez que se supere la pandemia: la provisión se seguridad acorde al aumento del delito que ya se registra y la creación de empleo que compense la pérdida de puestos de trabajo, una tendencia que también ya provoca estragos.
Aunque se trata de desafíos para toda la provincia, el territorio que más preocupa es el Conurbano, donde se registran los mayores índices delictivos y también los niveles más altos de pobreza y de desempleo. Por eso, buena parte de las definiciones se están conversando con alcaldes de esa zona. Hoy fue el turno de Jorge Ferraresi (Avellaneda); Mariano Cascallares (Almirante Brown); Juan Zabaleta (Hurlingham) y Martín Insaurralde (Lomas de Zamora).
En materia de Seguridad, el Gobernador mira con preocupación la tendencia al aumento de casos delictuales que va acompañando el aflojamiento parcial de la cuarentena en algunos distritos. Aunque según los últimos datos que difundió la Procuración General de la Corte aún no se alcanzaron los niveles pre pandemia no los de 2019, la presunción es que eso podría ocurrir e incluso que los índices tenderían a agravarse dado el impacto social del Covid-19.
Kicillof tiene en carpeta un plan integral de lucha contra la inseguridad que iba a lanzar el 25 de marzo pasado junto a su ministro de Seguridad, Sergio Berni, pero que quedó suspendido por la epidemia de Covid. Algunas de las acciones se fueron implementando desde entonces –entre ellas un cambio en el esquema de conducción de las policías locales- pero otras están pendientes.
Algunos ítems sobre los que en gobernación consideran que deberá avanzarse necesariamente son el equipamiento policial, los móviles, la contratación de nuevos efectivos, el nombramiento de más comisarios, posiblemente el mejoramiento de la tarea de inteligencia. Pero lo cierto es que los intendentes están aportando datos sobre las necesidades puntuales de sus distritos, algunas de las cuáles no son las mismas que antes de la pandemia.
En ese marco, corrió la versión del aporte de fondos nacionales de entre $8 y $10 mil millones, que habría sido tratado por Kicillof y el Presidente Alberto Fernández en una reunión mantenida en Olivos el marte pasado, de la que habrían participado también el presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa y el del bloque del FdT, Máximo Kirchner, que sería distribuido entre los municipios del Conurbano.
En Gobernación no confirmaron ni desmintieron la versión, pero indicaron que Kicillof negocia aportes nacionales en varias áreas para la provincia, aunque con un criterio general y no limitado geográficamente. Si aceptaron que con los alcaldes se trató la cuestión de la seguridad, aunque negaron que ese haya sido el eje principal o único del encuentro como se había dejado trascender en la previa.
“Si hubiese sido una reunión para acordar reparto de fondos por seguridad o medidas de fondos en ese área hubiese participado el ministro (de Seguridad Sergio)Berni, y no lo hizo”, enfatizaron voceros oficiales.
En tanto, en la reunión sí se trató el tema de la pérdida de empleo, una de las principales consecuencias económicas de la pandemia, que a nivel nacional fue estimado oficialmente para el caso de los puestos formales en 145.000 empleos solo durante marzo, abril y mayo. Pero que estudios oficiales ubican en cerca de 900 mil si se toma el período hasta principios de este mes y para todo tipo de empleo.
Kicillof quiere hacer de la obra `pública uno de los ejes de esa recuperación y busca acordar con los intendentes un foco que esté puesto en las obras menores, como la construcción de viviendas o pequeños trabajos de reparación y mantenimiento del moviliario urbano, porque generan más empleo que los mega proyectos, como la construcción de rutas. (DIB) AL