Días atrás, concejales de distintos bloques realizaron una visita al actual basurero a cielo abierto ubicado, detrás del matadero, en la prolongación de la calle Garay.
En la oportunidad se les dijo cuales son los trabajos que se llevarán a cabo en el lugar para su saneamiento y el tiempo que funcionará en forma conjunta con la planta que se construirá en la Ruta 20, antes de su cierre definitivo.
Respecto a esta última obra, que el gobierno local ha denominado Ecoparque Ambiental, que se adjudicó en el mes de enero de este año, se admitió la existencia de una demora, señalándose que la empresa a cargo de los trabajos ha culminado el proyecto ejecutivo, debiendo ser aprobado el mismo por las autoridades competentes provinciales.
Cabe recordar que el presupuesto oficial para la obra fue de $ 798.720.987,20 financiado a través de un programa del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en el marco del Programa de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (Girsu), que implementa el gobierno nacional.
También se mencionó, y esto es importante, que se llamará a las audiencias públicas que exige el BID para su préstamos, algo que no se hizo, aunque en algún momento se intentó interpretar que las reuniones llevadas a cabo en el Teatro Brazzola con el viceministro de Ambiente de la Nación, Sergio Federovisky, habían suplido ese requisito.
Lo cierto es que con la licitación adjudicada y el proyecto ejecutivo realizado, el llamado a audiencias públicas, si se lleva a cabo, parece más un requisito a cumplir, de dudosa legalidad a esta altura de las circunstancias, que una verdadera convocatoria a los vecinos para escuchar su opinión.
¿Qué son las audiencias públicas?
Las audiencias públicas son una posibilidad que tienen los ciudadanos para participar en las decisiones que deben tomar los organismos, empresas, sociedades, entidades y dependencias del Poder Ejecutivo Nacional; lo que da cuenta de su importancia, si bien sus decisiones no son obligatorias para el organismo.
¿Para qué sirven?
Para que los ciudadanos puedan participar en la toma de decisiones.
Para que las decisiones se tomen de manera transparente, a la vista de la sociedad.
Para que se conozcan los distintos puntos de vista, opiniones, estudios, conocimientos e informaciones que haya sobre el tema que se está decidiendo.
Oposición vecinal y otros problemas
Hasta el momento nada de esto se ha cumplido y la realidad indica que ya está todo decidido, pese a la postura negativa de los vecinos de la zona rural aledaña y recomendaciones del Defensor del Pueblo sobre cuestiones ambientales, por lo que habrá que observar como actúa el BID ante los incumplimientos.
Vale recordar que tras ser rechazada con marchas y protestas la instalación de una planta de estas características en la zona urbana, finalmente el gobierno municipal decidió utilizar un predio de la Ruta 20, donado para otros fines que no han sido respetados, sin escuchar a los vecinos de esa zona rural que se oponen por cuestiones ecológicas y de respeto al verdadero fin previsto para la tierra que era de características sociales y no para su uso como basurero.
Finalmente existe otro importante problema, que ha preocupado al Ministro Nacional de Economía, Sergio Massa, y es que el predio se encuentra embargado por el juicio de la rifa de las escuelas rurales, lo que significa un impedimento a su uso y seguramente a todo el proceso ya realizado, dado que si la obra no se puede hacer la firma adjudicataria solicitará un resarcimiento económico, en el que no se conoce públicamente cuál será la responsabilidad del Municipio de acuerdo a los convenios que firmó el Intendente Javier Gastón, antes que el Concejo Deliberante autorizara la obra por mayoría oficialista el último día que la tuvo, dado que la oposición, que ya había ganado las elecciones, voto negativamente.