“Andá a la tumba”: los escalofriantes mensajes del acusado de asesinar a su madre en Villa Martelli

El joven de 19 años, que primero dijo que su mamá se había suicidado, era tratado de “psicópata” y “narcisista” por la mujer. Y en un audio en un grupo de WhatsApp, comentó: “Soy pobre, al menos hasta que ella se muera”.

Mientras continúa la investigación del presunto matricidio de María Roxana Imbrogiano en la localidad bonaerense de Villa Martelli, en Vicente López, se conocieron los mensajes que compartía su hijo y acusado, Leandro, en las redes sociales.

A través de un hilo que viralizó en X la cuenta @badgyaItom con los posteos que compartió el joven de 19 años en los últimos meses se puede empezar a reconstruir la trama detrás del crimen de Imbrogiano, cuyo cuerpo fue encontrado el miércoles con cortes en la yugular y en las manos.

“Qué doloroso que es cuando tu propia ‘madre’ no entiende que te sentís mal!““Hoy te dejo entrar, mañana ya no”, escribió con sorna el acusado -al que @badgyaItom menciona con el apodo que tenía Leandro, “la Gatita”– en una de las historias publicada en sus redes, junto a una foto de su mamá con un despectivo apodo.

También se desprende de las distintas capturas que circularon en internet que la falta de trabajo del joven podría haber sido el origen del conflicto que fue tensando la relación entre madre e hijo hasta que se quebró, drásticamente.

“Andá a un psicólogo”, le decía la víctima a su hijo en otra de las conversaciones que se viralizaron, en la que también lo trataba de “psicópata” y de “narcisista”. La respuesta de él, fue un presagio de la tragedia. “Y vos a la tumba jaja”, contestó Leandro.

Uno de los chats divulgados en redes. (X @badgyaItom)
Uno de los chats divulgados en redes. (X @badgyaItom)

En tanto, en un mensaje de audio enviado aparentemente por el joven en un grupo de WhatsApp que tenía con amigos se sugiere cuál podría haber sido el móvil del crimen.

“Yo no tengo lugar chicos. Yo soy pobre y no lo voy a negar, soy pobre. Mi mamá tiene toda la fortuna, tengo que esperar hasta que se muera…”, dice el ahora detenido por el crimen de la madre.

El suicidio imposible

El caso se conoció este jueves, cuando la Policía llegó al domicilio de la calle Laprida donde convivían víctima y detenido, en la citada localidad del norte del Gran Buenos Aires.

Allí, tras recibir una alerta que se supo que había venido del novio del acusado, personal de la Comisaría 4ª de Vicente López encontró a la mujer tendida en el piso ya sin vida, con heridas cortantes en la yugular y en las palmas de las manos.

En el domicilio también se encontraba el joven, que le dijo a las autoridades que tras mantener una discusión, la madre se quitó la vida. Su relato llamó la atención dadas las heridas de la víctima. Además Leandro presentaba heridas en una mano y admitió haber manipulado y lavado elementos posiblemente utilizados para cometer el crimen.

El trabajo de la Policía Científica reveló que la víctima había sido degollada, lo que apuntó a un homicidio y no a un suicidio, como sostenía el hijo. (DIB) MM