¿Hundido por los ingleses?
Dos inquietantes versiones, surgidas de las familias de los submarinistas desaparecidos, llevaron inquietud respecto del destino final del ARA San Juan, desaparecido desde hace un mes en aguas del Mar Argentino.
En diálogo con una AM porteña, Claudio Rodríguez, hermano de Hernán Rodríguez, maquinista del submarino argentino, aseguró que en julio hubo una “persecución” por parte de un buque de bandera británica. “En julio los persiguió un submarino inglés, y los tuvo cerca. Eso lo contaron muchos familiares”, fueron sus palabras.
A esa revelación se sumó un mensaje que Roberto Daniel Medina, suboficial segundo del Submarino San Juan, envió a su familia el 4 de noviembre. “El lunes nos buscaba un helicóptero inglés y ayer los chilenos. Hay mucho movimiento allá”, se lee en el texto enviado por Whatsapp.
“Fue ese mensaje raro en el que nos decía que los estaba buscando un helicóptero británico y un buque chileno, pero lamentablemente no seguimos con esa conversación, quedó ahí. Ese fue el último mensaje”, relató la hermana del tripulante, Jésica Medina. “Yo no sé si se habrán acercado mucho a Malvinas, no sé cómo será el tema político. Eso es lo que nos dijo y es lo que nos queda a nosotros”, añadió en declaraciones a La Gaceta.
Más allá de la interferencia de naves y vehículos extranjeros, surgen inquietudes de los familiares en torno a las condiciones del submarino y los propósitos del viaje que lo llevó a Ushuaia. “Mi hermano estaba preocupado, él me dijo que 45 días era mucho. Y los jefes los mandaron igual a la misión. Él estaba preocupado”, reveló Medina.
“En el submarino había por lo menos una persona de Inteligencia Naval. Nos lo contó la mujer de ese hombre. Eso te lo puedo confirmar. A nosotros nos dijeron que los agentes de Inteligencia fueron por el tema de la pesca ilegal. Es mentira. De ida fueron prácticas de guerra, eso no lo sabe nadie. Se hicieron ejercicios militares”, remataron.
Más allá de las declaraciones de familiares, la Armada Argentina, informó ayer que el buque de investigación científica “Atlantis” de los Estados Unidos de Norteamérica inspeccionó dos contactos con elVehículo Operado Remotamente CURV21. Ambos resultaron negativos.
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