Psiquiatra Romina Bonadeo: «Me voy ´inducida´ de alguna manera sin opción»

Renuncia al Hospital Municipal

En una entrevista brindada al programa «Tardes El Trébol», que conduce el periodista Alfredo Perona por la FM «La Radio» 101,5, la Médico Psiquiatra Romina Bonadeo se refirió a la licencia que solicitó y le fue negada.
Paradójicamente, la profesional que integró un equipo hace poco tiempo atrás obtuvo una mención por un trabajo en un Congreso de Salud Mental, hoy ha tomado la difícil y triste decisión de dejar el Hospital, por una lamentable situación que se le ha hecho imposible de tolerar.
Bonandeo, comentó que «lamento muchísimo haber llegado a esta situación, sobre todo porque lo que solicité es un derecho. Yo estoy trabajando hace nueve años en el Hospital Municipal, nunca me pedí licencia durante todo ese tiempo, y he sufrido un desgaste, sobre todo estos últimos meses. El trabajo que presentamos en el Congreso, fue una manera de sublimar ese desgaste, ese malestar y poder ponerlo en palabras y uno como profesional de la salud, va encontrando vías de canalización como para sentir un alivio, y a veces esas vías se acaban y uno necesita descansar un poco».
Se la escuchó realmente apesadumbrada cuando continuó diciendo: «Lo que solicité lo argumente así. Que estoy realmente desgastada, particularmente en el ámbito del Hospital Municipal de Chascomús. Yo me desempeño como Psiquiatra en otros hospitales, como en Lezama, en Ranchos… Pero en Chascomús la situación es muy adversa hoy, y yo necesitaba tomarme unos meses para descansar y repensar mi práctica. Esa es la forma en que yo trabajo».
La profesional agregó que «Siempre traté de acompañar a mis pacientes, de generar un vínculo con ellos, y hoy por hoy sentía que no estaba en condiciones de hacer eso, entonces pedí al Director del Hospital una licencia por siete meses, sin goce de sueldo, y de hecho había pensado en colegas que me podrían reemplazar, solamente necesitaba tomar distancia y mirar esta situación con mayor distancia para ver que estaba pudiendo aportar. Mi trabajo lo hago a consciencia y es la salud de la gente, por lo que me parece que, si yo estaba yendo al Hospital y me sentía desbordada, no estaba aportando lo que ellos estaban necesitando y como me manejé todos estos años, priorizando a la persona. Entonces, decido tomarme esos siete meses, resignando mi sueldo, y dándome ese tiempo para poder repensar mi práctica, pero el Director del Hospital, me responde por un mensaje de texto que eso va a ser elevado a la médica Arias (Secretaria Municipal de Salud), y al Ejecutivo. Que van a ser quienes decidan si me otorgan o no esa licencia».
«Pasaron quince días y jamás nadie se comunicó conmigo. Nunca me llamaron. No pude explicar, no pude poner en palabras, no pude nada. Me llegó un decreto a la oficina de personal del Hospital diciendo que me era denegado ese derecho. Encuadrado en una ley que ni siquiera es la Ley de Carrera Médico Hospitalaria. Es de otra ley, que es la del empleado municipal, pero los profesionales del hospital estamos regidos por la primera, o sea que el destrato es absoluto. Ni siquiera se ocuparon de la situación en la forma correcta, y la verdad es que me sentí presionada a renunciar por una cuestión de principios», aseveró.
«No me siento bien para trabajar y me mandaron igual, en detrimento de la calidad de mi trabajo, y es perjudicar a las personas. Sobre todo, en el tema que yo me especializo», sentenció.
Por otra parte, narró que en este momento en el nosocomio se siente muy sola para afrontar situaciones complejas, asegurando que habla de una falta de apoyo y acompañamiento a los profesionales por parte de sus superiores.
Fue tajante al afirmar que «Hay malestar por todos lados, tal como lo contó la Licenciada Rebeca Biggi (Presidente de la CICOP), en referencia a los distintos profesionales del hospital».
«Por todo esto, siento la necesidad de explicar que lamentablemente he tomado esta decisión, pero me voy «inducida» de alguna manera, sin opción. Yo no quería esto, quería seguir atendiendo a la gente» agregó.
Culminó diciendo que «Nunca tuve la oportunidad de sentarme y hablar con el doctor Rodríguez (Director del Hospital San Vicente de Paul), o la doctora Arias.
Solamente en una oportunidad con el doctor Rodríguez por pedido mío, en relación al reclamo de un paciente, pero nunca más. Con la doctora Arias nunca tuve una conversación, entonces no sé qué piensan».

Be the first to comment

Leave a Reply

Tu dirección de correo no será publicada.


*