El ministro de Desarrollo Social dijo que se tomarán medidas ante un aumento significativo de casos, pero serán restricciones localizadas y no generales como ocurrió el año pasado.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, afirmó que el Gobierno no tiene pensado «volver a la lógica de cierres del año pasado», al tiempo que apuntó al ex presidente Mauricio Macri por sus dicho sobre Perón y señaló que «no es el más adecuado para hablar de trabajo».
«No vamos a volver a la lógica de cierres del año pasado», sostuvo Arroyo, al hablar de la suba de casos de coronavirus y las medidas que implementó la Casa Rosada para intentar surfear la segunda ola de contagios.
Según subrayó, «si hay rebrote se van a tomar medidas excepcionales» en materia social.
«La lógica es no restringir como el año pasado pero tomar medidas focalizadas», enfatizó en declaraciones radiales.
En tanto, al responderle al ex presidente por decir que Juan Domingo Perón estaría en Juntos por el Cambio porque ese espacio representa al «trabajador», Arroyo consideró: «Macri no es el más adecuado para hablar de trabajo. No le doy entidad para eso».
También rechazó los dichos del líder del PRO sobre Juan Carr y resaltó que «hace años viene trabajando con gente en situación de calle».
«Él construyó un esquema de solidaridad que ha ayudado a mucha gente», destacó Arroyo.
El ministro de Desarrollo Social, a la vez, admitió que «hay un serio problema con el precio de los alimentos» y reiteró que por la pandemia de «8 millones de personas en comedores se pasó a 11 millones en 15 días, y hoy se está en 10 millones».
Arroyo indicó que «en los barrios preocupa el tema precios» y la tarea del Gobierno «es achicar la intermediación en los alimentos».
«La sociedad respeta que el Gobierno está laburando y eso se va a reflejar electoralmente. Hay un reconocimiento de que el Gobierno se puso al hombro la pandemia», evaluó el ministro.
Por último, se refirió al rol de la vicepresidenta Cristina Kirchner y afirmó: «Juega en otras ligas, tiene otra cabeza, es más para escucharla que para charlar».
FUENTE : LA PRENSA