Desde la Asamblea Paren de Fumigarnos apoyan la ordenanza que regula el uso de agroquímicos

Se mostraron en contra de la flexibilización de los controles y apuntaron a una mayor promoción de la norma a fin de minimizar los efectos toxicológicos de daño en la salud y el ambiente.

Se conoció un comunicado de la “Asamblea Paren de Fumigarnos Chascomús” quienes se expresaron sobre el pedido a la Intendencia, desde el sector rural, para que se flexibilicen los controles en cuanto al cumplimiento de la Ordenanza que regula el uso de agrotóxicos en el partido de Chascomús.
El comunicado señala que “…la ordenanza de regulación de agroquímicos 5329/19 tardó más de 2 años en ser sancionada y aplicada desde su presentación allá por junio de 2016. Durante ese lapso de tiempo se dieron debates dentro del recinto del Concejo Deliberante local del cual participaron técnicos y científicos entre los cuales se destacaron Tania Rodríguez , Bióloga Molecular y Dra. en biotecnología (INTECH-UNSAM) y Damián Marino Dr. en química (UNLP-CONICET) los cuales expusieron a los Concejales y representantes del Ejecutivo Municipal los riesgos ambientales y para la salud de la población que implican las fumigaciones con agrotóxicos cerca de las poblaciones y escuelas rurales. La Dra. Rodríguez expuso investigaciones (publicadas) que daban cuenta de daño genético en niños y niñas en poblaciones ubicadas a menos de 1500 metros. Marino en cambio explicó las leyes físicas y químicas por lo cual es imposible controlar la deriva de los agrovenenos una vez lanzados al ambiente…”.
Y continúa diciendo “…la ordenanza finalmente fue sancionada y comenzó a aplicarse en abril de este año. No tuvo en cuenta en su redacción las recomendaciones de los científicos de INTECH, UNLP y CONICET…”, agregando que sí las propuestas del sector rural “para que las distancias de las fumigaciones sean mínimas de modo tal que permitieron fumigar a 200 metros de centros poblados…”.
Señalan que la ordenanza con todas las falencias que posee, desde su constitución, aplicación y promoción da cuenta de un intento de ordenamiento y control de las actividades de pulverizaciones con agroquímicos en el partido de Chascomús.
Sostienen desde la Asamblea que el sector rural volvería a presionar esta vez al Intendente, al cual acusaría de extralimitarse en el cuidado de la salud de la población.
A su vez, dan cuenta de cuáles serían estas extra-limitaciones:
• Exigir que un ingeniero agrónomo certifique con su firma que los agroquímicos utilizados para rociar los campos sean los correctos, en las proporciones adecuadas y que además supervisen la correcta aplicación en las condiciones ambientales recomendadas (sin vientos fuertes, sin lluvias próximas etc.)
• Sancionar con multas y prohibiciones para desarrollar la actividad si no se cumple con la normativa vigente (maquinaria habilitada, personal capacitado, respeto por las distancias y prohibiciones de fumigar cerca de poblados, cursos de agua y escuelas rurales (el 22 de mayo fumigaron en horario lectivo a la escuela primaria rural de Parque Girado (EP 23).
• Exigir que quienes vierten los agro-tóxicos en los campos se hagan responsables de los envases de los pesticidas llevándolos a centros de acopio para su tratamiento ya que al quedar tirados en los campos, cerca de cursos de agua con las lluvias y la degradación del sol son altamente contaminantes.
Desde la Asamblea Paren de Fumigarnos Chascomús indican que a la inversa, creen que el municipio podría:
• Lanzar una campaña de información pública orientada al conocimiento de la ordenanza y de la forma de denunciar transgresiones a la misma.
• Promover talleres en escuelas, centros de salud y sociedades de fomento sobre peligros de uso de agrovenenos, alimentación saludable y cuidados del ambiente.
• Cumplir con los artículos de la ordenanza que establecen que se debe analizar el agua de escuelas rurales y ampliar los controles sanitarios a las personas que habitan centros poblados expuestos a las fumigaciones (parajes, escuelas rurales, familias y trabajadores que manipulan agrotóxicos.
• Destinar recursos físicos y humanos en la actividad de control (hoy el área de fiscalización solo cuenta con una persona la cual tiene que controlar el cumplimiento de la ordenanza en todo el partido de Chascomus, además lo hace movilizándose en su auto particular.
• Apoyar al personal de las escuelas rurales (docentes y auxiliares) que se ven expuestos a la presión de los dueños de los campos donde se asienta la escuela y donde si denuncian corre peligro su trabajo.
• Ampliar el control de la ordenanza a los silos que se encuentran en funcionamiento en la zona urbanizada y en donde se utilizan grandes cantidades de agrotoxicos que son ventiladas al ambiente en el momento de carga, descarga y acopio.
Por último, sostienen que “…si bien para los productores es una fuente de ingresos extraordinaria y para el estado una forma de recaudación importante no se está teniendo en cuenta todo el daño que conlleva esta forma de producir alimentos…”.
Y añade que creen que el planteo del sector rural “rompe de alguna forma el contrato social en donde debe prevalecer el cuidado de la salud y la biodiversidad por sobre un interés personal…”. Dejando un encargo para los futuros concejales, para que puedan revisar el artículo de la ordenanza 5329/19 que establece 200 metros de distancia a partir de los cuales se puede fumigar, teniendo en cuenta los estudios científicos que avalan la distancia prudencial de 1.500 metros entre los agrotóxicos y las personas.