A hora de dejar su banca, el diputado marplatense Guillermo Castello presentó otra polémica iniciativa por la que declara “sujeto a privatización a la empresa Astillero Río Santiago”, fundamentando con frases impactantes tales como el astillero se transformó en “una gran caja negra política y sindical” o que es “un monumento al despilfarro y a la corrupción”.
El proyecto de ley establece que “la enajenación de ARS incluirá la venta de todos sus activos, bienes, valores, acciones y derechos de su propiedad”. También prevé que los trabajadores puedan participar del proceso de privatización, mientras que impide al personal jerárquico participar directa o indirectamente en la adjudicación por parte de alguna empresa.
Por otra parte, crea una Comisión Bicameral, compuesta por tres senadores y tres diputados, para controlar el proceso de privatización.
El legislador de la Coalición Cívica argumentó que “sostener empresas estatales para cumplir funciones del sector privado deriva en mayor déficit, mayores impuestos, burocracia y corrupción”. Cuestionó que el ARS triplicó su plantel, bajó la producción y genera “uno de los mayores déficit del mundo en empresas de este tipo”.
Castello dijo que “el Estado se limitó a entregar un enorme subsidio para mantener la paz social en la región, convalidando así un esquema de claros ribetes mafiosos”. Y agregó que “en los últimos años Astillero Río Santiago se ha transformado en una gran caja negra política y sindical”.
También denunció que “hay falsos empelados, descuentos salariales indebidos, jubilaciones adulteradas y bonos por productividad en una fábrica que hace casi doce años que no termina una embarcación”.
Por último, el diputado de Cambiemos aseguró que el astillero “se convirtió en un barril sin fondo para las finanzas provinciales” y que su funcionamiento “atenta claramente contra el objetivo de sanear las cuentas públicas de los bonaerenses, constituyendo un monumento al despilfarro, la corrupción y a la cultura del beneficio indebido como antítesis a la cultura del trabajo”.
Cabe recordar que Guillermo Castello había propuesto también regularizar los Uber en la provincia y se va de la Legislatura ingresando este proyecto de ley que tiene pocas probabilidades de prosperar.